El acné es más propio de la adolescencia y a medida que pasan los años desaparece. Pero en algunas personas no es así y el problema persiste en la edad adulta.
El acné es más propio de la adolescencia y a medida que pasan los años desaparece. Pero en algunas personas no es así y el problema persiste en la edad adulta.
Las causas del acné en la edad adulta se desconocen con exactitud. Entre ellas se barajan la predisposición genética, el tabaco, determinados medicamentos, el estrés, una alimentación desequilibrada o un cuidado inadecuado de la piel.
Pero la principal sospecha es que se trata de un acné de origen hormonal, es decir, que aparece como resultado de las fluctuaciones hormonales que ocurren a lo largo del ciclo menstrual.
Y es justamente en los días previos a la menstruación cuando se generan unas condiciones idóneas para que aparezcan más granitos.
ESTRÓGENOS ANTI-ACNÉ
Los expertos de Intimina explican que las fluctuaciones hormonales durante el ciclo (subidas y bajadas en los niveles de hormonas) influyen directamente en la producción de sebo y, por tanto, en la posible aparición del acné.
Hablamos de dos hormonas en concreto: los estrógenos y los andrógenos.
Los primeros tienen un efecto anti-acné, mientras que los andrógenos pueden favorecer su aparición.
Pero tras la ovulación, y hasta la llegada de la menstruación, entran en acción los andrógenos, y con ellos los brotes premenstruales de acné.
ANDRÓGENOS Y PRODUCCIÓN DE SEBO
Los andrógenos son hormonas sexuales masculinas y la más conocida es la testosterona.
Todas las mujeres tienen andrógenos y su concentración también cambia a lo largo del ciclo.
Algunos estudios apuntan que este desequilibrio entre estrógenos y testosterona podría ser la causa del aumento del acné premenstrual:
La hormona del estrés o cortisol podría ser otra de las causas hormonales del aumento de los brotes de acné.
CÓMO CONTROLAR LOS BROTE DE ACNÉ
Los expertos de Intimina recomiendan los siguientes consejos para reducir la producción de sebo y mantener el acné premenstrual a raya:
Sigue una rutina de cuidados de la piel. En la fase lútea (una vez has ovulado y hasta que llega la siguiente regla) insiste en los cuidados para reducir la cantidad de sebo. Utiliza limpiadoras para pieles grasas, exfolia la piel y evita las cremas muy densas.
CUÁNDO ACUDIR AL MÉDICO
En ocasiones el acné puede ser una señal de un problema más grave y no basta con hábitos saludables para mantenerlo a raya.
Podría tratarse de un problema estrictamente dérmico, pero de una magnitud que requiera tratamiento farmacológico. Si es tu caso acude al dermatólogo.
También podría ser una señal del síndrome de ovario poliquístico. En este trastorno los niveles de andrógenos son más altos y hay más problemas de acné.
En el acné severo, la terapia hormonal puede ayudar a controlar el problema porque reduce la concentración de andrógenos y equilibra los niveles de estrógenos y progesterona. Consulta con tu médico la posibilidad de tomar un anticonceptivo hormonal para controlar el problema.