La jornada de vacunación realizada en el Hospital Ashford superó la meta que tenía de 100 personas en el primer día y logró vacunar a sobre 155 profesionales de la salud
Yizeth Arellano
Agencia Latina de Noticias Medicina y Salud Pública
El miedo quedó a un lado y le dijeron sí a la inmunización
La jornada de vacunación realizada en el Hospital Ashford superó la meta que tenía de 100 personas en el primer día y logró vacunar a sobre 155 profesionales de la salud en su primer día de escribir la nueva página en la historia de la inmunización contra el nobel coronavirus que ha provocado que más de 1000 puertorriqueños hayan sucumbido ante la enfermedad.
En información confirmada a Medicina y Salud Pública (MSP), de seguir así este centro de salud podría culminar la primera fase antes de lo esperado y eso le permitiría seguir a la siguiente fase de vacunación, y de las personas vacunadas el primer día no se documenta ninguna reacción alérgica a la vacuna.
El martes 15 de diciembre del año 2020 quedó como el día histórico en el que se comenzó a inmunizar Puerto Rico, para que pronto pueda ser un país libre de COVID-19. A las 6:22 a.m. se llevó a cabo la primera vacunación, Yahaira Acevedo, terapista respiratoria, y primera profesional de la salud en recibir un caso de COVID-19 en la isla, se convirtió en la primera persona en recibir la vacuna de Pfizer y BioNTech en la isla.
En el salón Vizcarrondo del hospital Ashford se vivió de forma emocionante, organizada y supervisada la jornada de vacunación a los profesionales de la salud que ahí laboran. La segunda persona en vacunarse fue el Dr. Manuel Velilla, de más de 35 años de experiencia como médico gineco-obstetra y de reconocida trayectoria en el Hospital Ashford. Seguidamente, el Dr. Eduardo Canto, recibió la primera dosis de la vacuna de Pfizer y BioNTech.
La enfermera epidemióloga, Hilda Alemán fue quien administró 4 de las 5 dosis que contiene el frasco del preciado líquido para la vacunación contra el COVID-19. Alemán, fue vacunada por la enfermera ocupacional, Melisa Valentín, quien fue la quinta persona en recibir la última dosis del primer Bayer usado para comenzar la inmunización de Puerto Rico.
Los profesionales de la salud confesaron de forma risueña que su temor al “pinchazo” era superado por sus ganas de ejemplificar un acto que ayudará a la inmunización de todo Puerto Rico si el 70% de la población acepta vacunarse y cumple con el protocolo establecido. De forma comprometida con el país, la ciencia y los avances tecnológicos que hicieron posible la creación de esta vacuna, los médicos y las enfermeras compartieron su experiencia luego de ser vacunados.
“Queremos que esta pandemia termine, que salgamos de este encierro que tenemos, de esta lucha que tenemos todos el personal de la salud” expresó Alicea minutos previos a ser vacunada.
Alicea indicó que confía en las vacunas como la mejor forma de prevenir e inmunizar el COVID-19 y en especial, esta propuesta que es producto de la unión científica para detener la pandemia. “No tengan duda, se ha hecho estudios desde hace muchos años y esto no es nuevo, solo es otra pandemia más. Todos sabemos que tenemos que cuidarnos y tenemos que confiar en las personas que han hecho esta vacuna para resolver este problema que tenemos”, recalcó.
“Yo espero que en el futuro todo el mundo se pueda vacunar y se acabe este problema, este dolor de cabeza. Yo espero que con esta vacuna las cosas se empiecen a normalizar, que se acabe el encerramiento, la depresión y todos los problemas que está teniendo”, argumentó por su parte el Dr. Manuel Velilla, mientras esperaba ser inyectado.
Por su parte, el Dr. Eduardo Canto, investigador y doctor que facilitó las neveras para poder recibir las vacunas en el Hospital Ashford en Condado y explicó brevemente el efecto que tiene la vacuna en el cuerpo.
“Esta en particular yo creo que va a ser extremadamente segura porque yo creo que no tiene ningún químico que hace que los cuerpos reaccionen, sencillamente da las instrucciones para una proteína que te protege produciendo anticuerpos. Esta proteína no hace nada en el cuerpo, lo produce el músculo donde ella me va a inyectar y mi cuerpo produce anticuerpos contra esa proteína que es la que permite que el virus entre a la célula. Al tener anticuerpos el virus no puede entrar a la célula y no puede atacar” explicó el doctor antes de ser vacunado.
Seguidamente, la enfermera epidemióloga Hilda Alemán, comentó que le ha tocado con gran pesar notificarle a los pacientes cuando son positivos a COVID-19, y que no puede evitar respirar profundo cada vez que recibe unos resultados a la prueba del virus esperando que sean negativos cada vez que debe repetirlos.
“Ahora estoy al otro lado de la moneda, es emocionante aplicar, pero como dijo el Dr. Velilla a muchos profesionales de la salud no nos gusta que nos pinchen. Así que, aquí estoy también para poner mi mejor cara cuando me vacunen”, expresó Alicea segundo antes de ser vacunada.
“Es un momento bien especial, confiando en que este es el inicio de una nueva etapa” Comentó la enfermera ocupacional, Melisa Valentin, quinta persona que completó las primeras 5 dosis del proceso de vacunación con el que se dió inicio a la inmunización de los profesionales de salud del Hospital Ashford.
Luego de ser vacunadas, las enfermeras continuaron en su labor como administradoras de las vacunas para el COVID-19 que se encargó de vacunar a 16 personas por hora, hasta completar las 155 personas que contabilizaron en el resto de este primer e histórico día de vacunación en Puerto Rico.
La vacuna contra el COVID19 continúa siendo distribuida por los 65 hospitales del país.