La enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia entre las personas mayores.
La enfermedad de alzhéimer es la forma más común de demencia entre las personas mayores. La demencia es un trastorno cerebral que afecta gravemente la capacidad de una persona para llevar a cabo sus actividades diarias.
En una entrevista para Medicina y Salud Pública (MSP) el doctor José Carrión Baralt habla sobre qué es el alzhéimer, cuáles tratamientos están disponibles y cómo actúa la musicoterapia en el tratamiento de esta enfermedad.
El doctor nos comenta que “el alzhéimer es una enfermedad del cerebro, es una enfermedad degenerativa lo que quiere decir que es una enfermedad del sistema nervioso central y esta es degenerativa porque es irreversible y se pone peor con el paso del tiempo y hoy en día no hay forma de revertir ese daño” explica.
El alzhéimer comienza lentamente, primero afecta las partes del cerebro que controlan el pensamiento, la memoria y el lenguaje. Las personas con esta afectación pueden tener dificultades para recordar cosas que ocurrieron en forma reciente o los nombres de personas que conocen. Un problema relacionado, el deterioro cognitivo leve, causa más problemas de memoria que los normales en personas de la misma edad. Muchas, pero no todas las personas con deterioro cognitivo leve, pueden desarrollar alzhéimer.
Los científicos han identificado factores que aumentan el riesgo de padecer alzhéimer, los más importantes como la edad, los antecedentes familiares y la herencia, no se puede cambiar, pero existen nuevas pruebas que sugieren que podría haber otros factores sobre los que sí pueden influir las personas.
El doctor José aclara “hoy en día no conocemos la causa de la enfermedad, pero conocemos los factores asociados a la enfermedad, incluso factores de riesgo, pero una causa como tal no la conocemos, sabemos que la enfermedad está asociada a enfermedades cardiovasculares, por ejemplo, las personas con diabetes con estilo de vida sedentario son personas que tiene mayor probabilidad de desarrollar la enfermedad”
Hay elementos que se asocian al desarrollo de la enfermedad como el alcohol o el tabaco, también se encuentra el factor genético, esto no quiere decir que sea un factor determinante para el desarrollo de ella, ya que hay un 3 a 4 % de probabilidad que desarrollan un alzheimer de tipo familiar que viene determinado por una mutación genética.
En un principio, surgen pequeñas e imperceptibles pérdidas de memoria, pero, con el paso del tiempo, esta deficiencia se hace cada vez más notoria e incapacitante para el afectado, pues tendrá problemas para realizar tareas cotidianas y simples, también otras más intelectuales tales como hablar comprender, leer o escribir.
El especialista comenta que “el síntoma clásico de alzheimer es la pérdida de memoria cercana o temprana, lo que quiere decir que lo que pasó hace cinco minutos o una hora para la persona que padece la enfermedad empieza ser a corto plazo. Aparte la función del día a día, ya sus destrezas no serán las mismas, otra señal es cuando la persona empieza a tener cambios de ánimos repentinos"
La diferencia certera para diferenciar el alzhéimer con la pérdida de memoria normal de la edad se logra a través de estudios neuropsicológicos específicos que se hacen a las personas con alzhéimer, por medio de los cuales se observa si son síntomas normales de la edad o si hay una alteración neurológica notable.
Todavía no existen formas claras para prevenir la enfermedad, pero existe evidencia sólida de que varios factores relacionados con un estilo de vida saludable pueden tener efecto en la reducción de riesgo de padecer la enfermedad de Alzheimer y otros tipos de demencia. Sin embargo, se necesitan más investigaciones antes de que se considere a cualquiera de estos factores como una estrategia demostrada para prevenir la enfermedad de Alzheimer.
“yo creo que más que prevención (se) puede reducir riesgos y, hoy en día, no hay ninguna evidencia que si usted nunca tuvo diabetes, nunca tuvo presión alta, nunca estuvo deprimido le va a dar alzhéimer. Casi todos los modelos de prevención se resumen, para una buena una vida necesitas una buena alimentación y hacer ejercicio” explica el galeno.
Las pruebas neuropsicológicas pueden detectar los primeros cambios cognoscitivos de las personas, pero hay problemas con esto ya que si una persona se siente bien y no presenta los síntomas de la enfermedad, no irá a realizarse los chequeos médicos respectivos para poder detectar el padecimiento.
El doctor aclara “hasta ahora no hay un ensayo clínico que esté dando todos los indicios de que vamos a tener ese tipo de pruebas para este año o el año que viene”
En una terapia para las personas con alzhéimer se debe trabajar con las fortalezas que le quedan y no con las deficiencias que se tienen, en su mayoría la demencia afecta principalmente la función cognoscitiva, pero la función de procesamiento emocional queda intacta hasta más avanzada la enfermedad.
La musicoterapia ha dado resultados positivos en cuestiones de mejoras en la función cognoscitiva y anímica, pues hace que los pacientes al escuchar tengan una conexión emocional y recordar algunas cosas.
El doctor nos comenta “si a la terapia musical se le añade el componente del baile no solo por el beneficio de la música si no por que entra el ejercicio físico y esto ayuda a que estén animados y se fortalezcan, aparte que los ayuda a socializar” concluye.
Se ha investigado el efecto de la música sobre los síntomas psiquiátricos de pacientes con demencia. Aunque la relación de estos estudios es difícil por las características de los pacientes y por la heterogeneidad y variedad para medir emociones con una terapia musical que pueden estar interferidas por variables culturales de experiencia, se ha demostrado el efecto beneficioso de la música sobre la ansiedad, la agitación, la depresión de pacientes con alzhéimer