La emergencia por el Huracán María, que ha dejado una devastación histórica en el país, ha interferido sin lástima alguna con los servicios de salud en los hospitales puertorriqueños.
Esto ha provocado la activación de protocolos nunca antes vistos para que la población pueda mantener acceso a la atención médica que urge en situaciones extremas. Al respecto, se han activado unidades móviles en las inmediaciones del Centro Médico en Río Piedras, mientras se trabaja para llevar instalaciones semejantes a través de la Isla.
"Con estas unidades estamos preparados para recibir todo tipo de pacientes y ayudar a todos los hospitales”, ha dicho públicamente Jorge Matta González, director ejecutivo de la Administración de Servicios Médicos de Puerto Rico (ASEM).
Estas unidades son un tipo móvil de hospital, preparadas para trabajar emergencias que no requieran cirugías mayores. En los mismos se han reclutado personal voluntario especializado de varios estados, entre los que se incluye técnicos de laboratorio, enfermeras y médicos, además de otros empleados sanitarios.
Matta ha prevenido, asimismo, que estas facilidades darán espacio a 300 pacientes adicionales en Centro Médico, donde se anticipa una avalancha de enfermos tras examinar la situación más allá del área metro. El Director Ejecutivo de ASEM ha adelantado que se añadirán siete unidades similares en diferentes regiones del país.
Entretanto, el gobernador Ricardo Roselló Nevares ha precisado que habrá al menos un hospital en funciones en cada región. Comunicó, además, que los hospitales afectados con daños mayores, cuyas funciones esenciales se han visto interrumpidas, serán desalojados.
Rosselló ha sido específico en que la Autoridad de Energía Eléctrica trabaja para que se pueda restablecer la prestación de este servicio en el Centro Médico de Río Piedras. Ha indicado también que la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados ha estado proveyendo agua potable al Centro Médico a través de sus camiones cisternas.
Ese es, precisamente, el mayor desafío que enfrentan los hospitales: las limitaciones de agua en sus cisternas y diesel para los generadores eléctricos, de acuerdo al presidente de la Asociación de Hospitales de Puerto Rico (AHPR), Jaime Plá Cortés.
Por tal razón, el funcionario ha recomendado a la población a ejercer prudencia al momento de determinar una posible visita a una sala de urgencias, para no abarrotarlas.
“Nuestra recomendación es que, de no tener una necesidad grave para el uso de nuestras facilidades, permanezcan en donde están. Se atenderán los casos estrictamente de emergencias“, destaca.