Dr. Natalio Desb ha dedicado su carrera en cirugía plástica por la población pediátrica con deformaciones faciales y quemaduras.
La cirugía plástica no solo corrige detalles estéticos, sino, da la oportunidad de mejorar defectos y ayudar en la autoestima de por ejemplo, niños que nacen con malformaciones faciales como el labio y paladar hendido.
Esta ha sido la diferencia en la práctica de cirugía reconstructiva del Dr.Natalio Desb, destacado en Puerto Rico por su encomiable labor con la comunidad pediátrica que nace con malformaciones faciales, dedos fraccionados por accidentes y la reconstrucción del rostro de aquellos que han sufrido quemaduras.
Desde el 2008, el especialista es parte de la clínica de Cirugía Plástica de Centro Pediátrico Metropolitano del Hospital Pediátrico
Los programas de la Escuela de Medicina Dental y Ortodoncia del Recinto de Ciencias Médicas (RCM) y un cúmulo de especialistas pediátricos constituyen el equipo que complementan la labor del Dr. Debs con esta población que día a día muestra el agradecimiento por la oportunidad de tener una mejor calidad de vida.
Parte de las funciones de Desb es trabajar proyectos de investigación para la búsqueda de los avances en tratamientos para la comunidad pediátrica con labio y paladar hendido en Puerto Rico.
No obstante, hace más de una década Debs colabora varias veces al año con el cirujano Robert Watson, cirujano plástico que, sin remuneración alguna, viene a Puerto Rico a realizar cirugías reconstructivas en niños en el Hospital San Jorge.
“Mi mayor satisfacción es hacerlos feliz. También ayudo a los niños que nacen con malformaciones genéticas en brazos y manos en (el estado de) Philadelphia. Con la bendición de ser médico, he podido ayudar. Lo mejor que puedo ofrecer como cirujano plástico con un niño con una malformación facial, es lograr que tenga una apariencia normal y la sonrisa de los papás cuando ven los resultados. Con eso uno recarga las baterías de por vida”, indicó Debs a la Revista de Medicina y Salud Pública (MSP).
“A veces no importa cuanto hagas, esta población tiene muchas necesidades, sobretodo de apoyo psicológico. Esto es una labor interdisciplinaria y existen muchas injusticias en los accesos a los servicios que necesitan estos pacientes y las familias necesitan mucho apoyo y ayudas”, manifestó el especialista que opera sobre 100 pacientes al año.
El trabajo médico con estos niños es uno cada día más retante, pues la incidencia de malformaciones con labio y paladar hendido ha ido aumentando por razones que aún se desconocen, aseguró Debs, quien también atiende pacientes con cáncer de seno.
“Estamos trabajando en un estudio epidemiológico de estos niños en Puerto Rico. Queremos saber en qué municipios se reportan más casos y otros datos que nos ayuden a continuar ayudándolos”, declaró.
“Hay mucho que hacer y hay mucha necesidad en esta población. Invito a otros profesionales médicos a unirse en esta misión”, concluyó.