La psoriasis es una enfermedad que tiene una gran prevalencia en todo el mundo, en Puerto Rico existen, aproximadamente, 35.000 a 100.000 personas que la padecen.
Eduardo Najar
Agencia Latina de Noticias Medicina y Salud Pública
La psoriasis es una enfermedad que tiene una gran prevalencia en todo el mundo, en Puerto Rico existen, aproximadamente, 35.000 a 100.000 personas que la padecen.
La psoriasis es una enfermedad muy común que ataca la piel de las personas, especialmente algunas zonas en específico, los pacientes pueden presentar llagas e incluso placas que causan mucho dolor debido al alto grado de sensibilidad y al quebrantamiento de la epidermis. En exclusiva para la revista de Medicina y Salud Pública el doctor José González Chavez hace un gran énfasis en la enfermedad aludiendo a su definición, prevalencia, factores de riesgo y, principalmente, a los nuevos tipos de tratamientos.
“La condición se considera hoy en día como autoinmune, antiinflamatoria y genética. Existen cuatro factores los cuales influyen mucho en la aparición de la placa de psoriasis. En un primer momento está la genética como se mencionó anteriormente ya que muchos genes pueden desencadenar la misma morfología de lesiones de la psoriasis, la segunda causa es el proceso de autoinmunidad en el cual se descarrila y como respuesta se obtienen las heridas, a esto se le denominan respuestas exuberantes, la tercera son los factores desencadenantes que hacen que la enfermedad se desarrolle, entre estas causas se encuentran el estrés, infecciones y algunos medicamentos, por último está el proceso de autoinflamación que es la respuesta a la proliferación de la piel, la cutícula de un paciente se divide aproximadamente 35 veces más rápido que la epidermis de una persona normal, esta se pone gruesa y escamosa “añade el especialista.
Además de que la enfermedad se manifiesta en la piel, por sus características la psoriasis también causa el mismo proceso inflamatorio y de desregulación inmunológica que la artritis. Esto evidencia que la artritis es una comorbilidad común de la psoriasis, pues la mayoría de pacientes que padecen de esta dolencia en la piel también cuentan con dolores en las articulaciones y el sistema óseo, aproximadamente el 30% de individuos cuentan con ambos padecimientos.
Existen otras enfermedades que aparecen debido a la psoriasis como el síndrome metabólico, enfermedades renales, uveítis, enfermedades inflamatorias de los intestinos y también trastornos psicológicos.
“Aquellas enfermedades que están relacionadas con la psoriasis debido a un trastorno inmunológico pero que no hacen parte de la misma, se denominan comorbilidades” enfatiza el doctor.
“Principalmente existen los tratamientos de carácter biológico que atienden la enfermedad de moderada a severa, estos surgieron debido a la nueva tecnología de anticuerpos monoclonales de donde se crea una célula la cual se inmortaliza en algún laboratorio farmacéutico, con el fin de producir una proteína que, al ligar con una inmunoglobulina, produzca un efecto ya sea de bloquear un receptor, neutralizar una interleuquina o hacer una combinación de estos factores, con el fin de tratar la enfermedad. Un tratamiento biológico siempre es único para cada compañía farmacéutica, cada una de estas ha creado una célula que produce proteínas que van a ser una de las funciones anteriormente mencionadas” dijo González.
Anteriormente los tratamientos se otorgaban de manera empírica, pues se desconocía el origen como tal de la enfermedad y los especialistas creían que era un padecimiento normal de la piel, gracias a las investigaciones pudieron asociar a la psoriasis con una afectación al sistema inmunológico, específicamente en los linfocitos T, permitió encontrar diagnósticos adecuados para una debida recuperación en pacientes.
Los primeros tratamientos biológicos surgieron aproximadamente entre los años 2004 y 2005, actualmente se cuentan con más de 12 y siguen apareciendo más de diversos tipos y con funciones específicas.
Es muy importante analizar adecuadamente la causa de una enfermedad en la piel, pues muchas personas tienen diagnósticos erróneos del padecimiento y su origen, es importante resaltar los tratamientos y sobre todo su funcionalidad con el fin de otorgarles a los pacientes seguridad y tranquilidad, pero ante todo brindarles una mejor calidad de vida.