Ante una mutación que se desarrolló hace unos meses en Europa, la preocupación respecto a la garantía de inmunidad fue un cuestionamiento central.
Dr. José Rodríguez Orengo, científico de la Universidad de Puerto Rico (UPR) y director ejecutivo del Puerto Rico Public Health Trust
Katherine Trujillo Useche, Eduardo Najar
Agencia Latina de Noticias Medicina y Salud Pública
Es normal que un virus mute en distintas cepas diferenciales respecto al genoma inicial y este cambio puede traer consigo características diferentes, como se ha hecho saber en semanas anteriores la nueva cepa de coronavirus es mucho más contagiosa.
Para nadie es un secreto que la mayor preocupación desde el origen de esta nueva mutación es si las vacunas que se están implementado alrededor del mundo poseen también efectividad respecto a este subtipo, varios especialistas insisten que estos fármacos cuentan con elementos trascendentales para combatir este cambio genómico del SARS-CoV-2.
En entrevista para Medicina y Salud Pública (MSP), el Dr. José Rodríguez Orengo, científico de la Universidad de Puerto Rico (UPR) y director ejecutivo del Puerto Rico Public Health Trust, explica sobre las nuevas variantes que han preocupado al mundo ya que estudios han confirmado que son más contagiosas y su relación con la efectividad de las vacunas.
El doctor aclara que la biología de los virus presenta mutaciones, pero asegura que una de las buenas noticias es que el coronavirus muta un poco menos que otros virus, ya se hicieron estudios con la vacuna de Pfizer donde se aclaró que esta vacuna tiene una cobertura para las nuevas variantes y estos mismos estudios se harán en la vacuna de Moderna para comprobar que también son efectivas frente a la nueva mutación.
Para seguir garantizando el proceso de vacunación y lo más importante la inmunización de manera masiva, el protocolo o la Fase 1B se está implementado alrededor de la isla de Puerto Rico y se busca que determinados sesgos poblacionales puedan acceder a este proceso.
El Dr. Orengo indica “que la cantidad de las personas que se han vacunado con relación a las vacunas que tenemos disponibles puede mejorar, en el día 12 de enero se comenzó la fase 1B, se esperaba que fuera la semana próxima, así que se adelantó una semana para acoger a las personas mayores de 65 años y a todos los empleados de funciones gubernamentales que sean esenciales para la economía y la seguridad de Puerto Rico”.
No existen algunas reacciones a consideración que se puedan presentar durante la administración del fármaco. No obstante, es de suma importancia que se sigan llevando a cabo los protocolos en la vacunación alrededor de la isla para prevenir aquellas repercusiones que pueden poner en riesgo la salud del paciente.
“Al vacunarse se puede sentir un poco de dolor en el brazo por unos días, no se han visto tantas reacciones alérgicas, he visto que en los lugares donde se aplican las vacunas en la isla se están siguiendo las recomendaciones, se están dejando en observación por 15 minutos a las personas después de vacunarlas y si alguna persona tiene una reacción alérgica se quedan 30 minutos con el salubrista para estar seguro que no ocurra nada”, concluyó.
