Dolor opresivo acompañado de dificultad respiratoria, pesadez, nauseas, sudor excesivo o diaforesis, sentir sensación de morir hacen parte de la sintomatología de un fallo cardíaco.
El Dr. Aníbal Lugo, cardiólogo, director del Laboratorio de Cardiología y Cateterismo del Hospital de la Concepción habló con la Revista Medicina y Salud Pública (MSP), en su programa especial titulado "Conéctate con tu especialista" que se emite todos los jueves a las 5pm, sobre el dolor de pecho como una afección cardíaca que se conoce como los síndromes coronarios agudos y destacó la importancia del diagnóstico oportuno y lo vital resulta buscar ayuda temprana.
Muchas personas en algún momento sienten dolor en el pecho y este tiene muchas etiologías, siendo la más común la etología neuromuscular.
Las personas jóvenes sienten dolor de pecho que molesta y es reproducible a la palpación, pero pese a ello, no es una molestia del corazón.
Otro de los dolores comunes que la gente refiere es el reflujo gastroesofágico, característico por dolor asociado con acidez y el paciente mejora cambiando de posición o tomando anti-ácido.
Dolor de pecho relacionado a síndromes coronarios agudo es un dolor de tipo opresivo que una vez el paciente lo experimenta se da cuenta que algo está sucediendo.y cuando tiene esta sensación es importante que el paciente reconozca los síntomas y busque ayuda temprano.
"Dolor opresivo acompañado de dificultad respiratoria, pesadez, nauseas, sudor excesivo o diaforesis, sentir sensación de morir... es lo que hace que vaya a emergencias por su intensidad de moderada a severa", explicó el Dr. Lugo, mientras hacia referencia a la sintomatología.
“Esa es la diferencia entre la vida y la muerte en muchos casos y la clave para mantener un corazón sano a largo plazo o llegar tarde a recibir ayuda y tener un corazón con enfermedad de por vida”, recalcó el cardiólogo.
De acuerdo con el especialista, algunos factores de riesgo como la diabetes, presentan mayor riesgo de sufrir enfermedad cardiovascular, así como quienes tienen colesterol alto y fuman o mayores de 60 años, pues es una etapa en la que debe prestarse mayor atención a los síntomas.
Ante esto, la recomendación es acudir si los dolores son de moderados a severos o severos lo antes posible a sala de emergencia, indicando los síntomas para que el personal médico actúe rápido y, luego de los estudios que se practiquen se podrá determinar si se trata de un infarto que requiere tratamiento inmediato, una angina inestable que requiere tratamiento de urgencia con medicamentos o si está estable y se puede manejar con medicamento.
“Cuando el paciente presenta una obstrucción de una coronaria que es lo que usualmente causa un infarto, lo importante es restablecer el flujo lo antes posible. Con el fin de salvar el músculo cardíaco”, expuso el especialista.
Para tratar al paciente, el cardiólogo intervencional suele acudir a una angioplastia coronaria, también llamada intervención coronaria percutánea, un procedimiento que se utiliza para abrir las arterias obstruidas del corazón por lo que con apoyo de un cateterismo destapa la arteria lo antes posible. procedimiento fundamental que debe practicarse antes de que pasen 60 o 90 minutos, pero lo lamentable es que la mayoría de los centros de Puerto Rico no cuenta con este servicio.
También, hay opción con los tromboliticos, un medicamento que ayuda a restablecer el flujo para salvar el músculo y evitar arritmias o fallo cardíaco a largo plazo, al igual que Nitroglicerina sublingual que salva vidas y mejora los síntomas, abriendo el vaso y mejorando la circulación, ya sea en casa o en el hospital.
“Si usted padece una condición, ya sea diabetes, hipercolesterolemia, fumador, tiene una vida sedentaria, lo importante es que todos esos factores se corrijan, también, si en las familias hay muchos casos de enfermedad del corazón hay que consultar”, señaló.
Las recomendaciones del doctor son hacer ejercicio moderado o, de leve a moderado si considera que tiene limitaciones, cuidar la dieta especialmente las grasas y los azucares y tener adherencia con los medicamentos que receta el médico, recordando siempre que el corazón es solo uno.
