La endocarditis continúa siendo una de las infecciones cardíacas que puede tener más frecuencia en adultos de 60 años o más.
Esta vez, un paciente puertorriqueño no solo presentó esta complicación de origen bacteriano sino que también desembocó en un cuadro clínico raramente visto en poblaciones adultas.
Así lo reveló a Medicina y Salud Pública (MSP) el doctor Miguel Laforet Matos, médico internista del Manatí Medical Center (MMC), quien fue parte del equipo médico que atendió al hombre de 58 años.
La endocarditis infecciosa afecta el revestimiento interno del corazón (endocardio), que también suele afectar a las válvulas cardíacas. Se produce cuando las bacterias acceden al torrente sanguíneo, llegan a las válvulas cardíacas y se adhieren a ellas.
“El paciente se quejó de picor en las extremidades, lesiones en los muslos, que son síntomas característicos de la vasculitis. A este paciente se le midieron los niveles de IgA (que mide reacciones alérgicas) y se le mandó a hacer una biopsia de las lesiones halladas”, explicó el Doctor.
“La biopsia salió positiva a vasculitis leucocitoclástica -que afecta a los vasos sanguíneos pequeños principalmente de la piel- mediada por la endocarditis. Este tipo de vasculitis es bien común en niños en alrededor del 90 al 95% de los casos. El resto ocurre en adultos. La prevalencia de esta vasculitis leucocitoclástica con biopsia positiva es 4.5% por cada 100 mil en adultos”, afirmó.
La vasculitis leucocitoclástica fue tratada en este paciente con medicamentos esteroidales, mientras la endocarditis con antibióticos.
Otros factores de riesgo para la endocarditis son válvulas cardíacas artificiales, válvulas cardíacas dañadas, defectos cardíacos congénitos, dispositivo cardíaco implantado, antecedentes de endocarditis, antecedentes de consumo de drogas intravenosas ilícitas, uso de catéter a largo plazo, entre otras.