Y esto es precisamente lo que le ocurrió a una ciudadana china, de apellido Chen, que acudió a un hospital y aseguró que no podía oír la voz de su novio, según han reportado la agencia AFP y medios locales chinos.
BBC Mundo
¿Te imaginas dejar de oír voces? No ruidos, voces humanas. Pero solo las de los hombres... Algunos pueden que hasta vean en esto una ventaja o un sueño hecho realidad, pero lo cierto es que se trata de una afección extraña llamada pérdida auditiva de pendiente inversa.
Las personas que la sufren dejan de escuchar los sonidos de baja frecuencia, incluidas las voces masculinas promedio, además del zumbido de un frigorífico, un microondas o incluso los truenos. Según la
Organización Mundial de la Salud
(
), unos
466 millones
de personas en el mundo (un
5%
de la población) tiene problemas incapacitantes de audición. De ellas, unas
3.000
pueden experimentar esta afección sólo en Estados Unidos y Canadá.
Y esto es precisamente lo que le ocurrió a una ciudadana china, de apellido Chen, que acudió a un hospital y aseguró que no podía oír la voz de su novio, según han reportado la agencia AFP y medios locales chinos. La noche anterior al acudir al hospital, contó la otorrinolaringóloga Lin Xiaoqinga a los medios locales, Chen había estado vomitando y sintiendo zumbidos en los oídos. Chen acudió al hospital donde fue atendida por la doctora Xiaoqinga, que le diagnosticó pérdida auditiva de pendiente inversa al comprobar que escuchaba su voz, pero no las voces masculinas de los pacientes y del personal sanitario.
En el caso de Chen, indicó la doctora, la afección la causó un
, largas jornadas de trabajo y falta de horas de sueño. Con un tiempo de descanso la capacidad auditiva debería mejorar, declaró Xiaoqinga. La pérdida auditiva de pendiente inversa es generalmente hereditaria, y a menudo está relacionada con condiciones como el
síndrome Wolfram
, que sufren algunos
, o con displasia de Mondini, que afecta a la cóclea, una parte interna del oído cercana al nervio auditivo. A veces puede ser causada también por un cambio de presión en el líquido interno del oído, una abertura anormal en este órgano, como efecto secundario de una anestesia general o por experimentar alta presión en el sistema nervioso central. Las personas con pérdida auditiva de pendiente inversa pueden tener dificultades para escuchar las voces por teléfono o el ruido del motor de los automóviles. El diagnóstico es difícil porque generalmente, salvo en
en los que la pérdida auditiva se agrava, las personas que lo sufren no se dan cuenta de que escuchan los sonidos de baja frecuencia de forma diferente a las personas con una audición normal.