Sus estudios contribuyeron a posicionar esta área de la medicina, que se consideró durante muchos siglos y años como una ciencia empírica. Falleció a la edad de 96 años.
El médico Luigi Luca Cavalli-Sforza, pionero y reconocido genetista italiano falleció a la edad de 96 años. Sus estudios contribuyeron a posicionar esta área de la medicina, que se consideró durante muchos siglos y años como una ciencia empírica. Pero sin duda, su mayor logro fue el hallazgo y la comprobación del origen de la humanidad en África.
El Dr. Cavalli-Sforza, nacido en 1922, cursó la carrera de medicina en Turín durante la II Guerra Mundial. Tuvo el privilegio de ser alumno y compañero de trabajo de Adriano Buzzati Traverso, considerado el padre de la genética italiana y quien fue una de las figuras más influyentes y motivantes para su trabajo.
Su trabajo en investigación comenzó con las moscas Drosophila, referentes internacionales para la ciencia y la medicina que todavía se mantienen vigentes. Para complementar su formación, Cavalli-Sforza viajó a Cambridge para tomar clases de estadística con Ronald Fisher,
Gracias a estos conocimientos y al enorme potencial que descubrió en ambas áreas, el doctor italiano tomó la decisión de estudiar genética de poblaciones. A través de la genética, logró estudiar y encontrar diferencias en los tipos de sangre y el factor RH. Además, analizó el cromosoma Y, presente en todos los hombres.
Con los datos obtenidos después de décadas de esfuerzo y perseverancia, pudo afirmar que los humanos -entre otros homínidos- provenimos de África y que somos una sola raza. Otros de sus hallazgos revelaron que una parte de los primeros humanos, provenía de Siberia.
Su campo de acción, enfocado en la humanidad y sus orígenes, lo llevó a convertirse también en antropólogo. Viajo incontables veces por el mundo, compartió con poblaciones ancestrales de África y se declaró un activista en contra del racismo. Diseñó un árbol genealógico de la humanidad en el que consignó los nuevos descubrimientos frente a la materia.
A lo largo de su vida recibió importantes galardones, entre ellos el William Allan Award, que premia las mejores investigaciones en genética.