El grupo de Ingeniería Tisular del departamento de Histología de la Universidad de Granada (España), que dirige el profesor Antonio Campos, desarrolló un nuevo modelo de piel artificial con propiedades muy similares a la piel nativa a partir de células madre procedentes de biopsias cutáneas y de un biomaterial formado por fibrina y agarosa, también diseñado por el grupo.
Tras numerosas investigaciones preclínicas y controles de calidad, dicha piel se aplicó por primera vez con éxito en 2016 a grandes quemados, tras su elaboración como medicamento de terapia avanzada por la IATA (Iniciativa Andaluza de Terapias avanzadas).
La generación de dicha piel exige para su fabricación obtener biopsias cutáneas de las zonas no quemadas de los pacientes para poder elaborar con posterioridad la piel artificial a implantar en los pacientes, en un proceso que requiere varias semanas.
Ahora, el grupo de Ingeniería Tisular de la UGR ha logrado la biofabricación de cuatro nuevos modelos de piel artificial utilizando células madre de tejido adiposo, pulpa dental, médula ósea y cordón umbilical.
Los científicos han logrado diferenciar estas células madre en tejido epitelial sobre el biomaterial previamente diseñado, generando de este modo piel artificial a partir de estas nuevas fuentes celulares. Los resultados de este trabajo han sido publicados en la revista European Cells & Materials Journal.
La ventaja de estos nuevos modelos consiste en su posible utilización con carácter inmediato, sin la necesaria espera de varias semanas para la fabricación de la piel artificial con las células del paciente quemado.
En la investigación realizada en la UGR se lleva a cabo un estudio comparado histológico, genético y de histocompatibilidad en la piel fabricada con cada tipo de célula madre, estableciendo las características de los distintos modelos generados y su posible uso terapéutico, sobre todo en aquellos pacientes cuya gravedad no les permitiría esperar el tiempo necesario para la fabricación de piel artificial con sus propias células.