Nuevo estudio determina que la gravedad de estas patologías dermatológicas, puede reducirse mediante la inhibición sistémica en lugar de un proceso local de la piel.
En la Psoriasis, los factores desencadenantes suele aparecer por primera vez en la edad adulta, a raíz del estrés y la radiación UV, pero existen también una predisposición genética a desarrollarla. La activación del gen S100A9 en la piel y en las células inmunitarias se ha identificado como un factor de riesgo para el desarrollo de psoriasis y artritis psoriásica.
Mediante una investigación se habría descubierto que mediante la inhibición de forma sistémica en todo el organismo del gen S100A9, se podría reducir la gravedad de la Psoriasis y la Artritis psoriásica, en lugar de focalizarse únicamente en la piel.
El equipo de investigación Facultad de Medicina de la Universidad de Viena, encontró ese punto de partida, por medio del cual se puede impedir la inflamación en estas dos condiciones; todo el proceso fue centrado en el gen S100A9, que desde hace tiempo es el centro de sus investigaciones científicas sobre la psoriasis, que gozan de prestigio internacional.
Los hallazgos de los investigadores, pueden servir de base para desarrollar nuevas estrategias de tratamiento, diagnóstico y prevención; sentando las bases para un cambio de paradigma en el tratamiento de estas dos enfermedades, "un paso importante hacia el desarrollo de opciones terapéuticas dirigidas en forma de fármacos que actúan sistémicamente en lugar de localmente en la piel", afirma uno de los líderes del trabajo, el Dr. Erwin Wagner.
Tal y como ha demostrado, los síntomas de la psoriasis desaparecen cuando se desactiva el gen S100A9 en todas las células del cuerpo. Los recientes experimentos preclínicos en roedores, han podido arrojar luz sobre la influencia particular que tienen las células cutáneas e inmunitarias en las que se produce el S100A9 en la gravedad de la enfermedad.
"Ahora sabemos que las respuestas inflamatorias en la psoriasis y la artritis psoriásica aumentan cuando el S100A9 solo se inhibe en las células de la piel. Por ello, los fármacos que inhiben el S100A9 deben administrarse por vía sistémica en forma de comprimidos o goteros", concluye el Dr. Wagner.
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