La molécula ACE-2, que se encuentra en la superficie de las células pulmonares, es el «punto de entrada» que permite que el coronavirus ingrese a las células de los pulmones y cause una infección
Publicado en ABC
Las personas con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y los fumadores son especialmente vulnerables a la enfermedad que causa el coronavirus COVID-19. La razón radica en que tienen niveles más elevados de una molécula, llamada enzima convertidora de angiotensina II (ACE-2), en sus pulmones.
La molécula ACE-2, que se encuentra en la superficie de las células pulmonares, es el «punto de entrada» que permite que el coronavirus ingrese a las células de los pulmones y cause una infección. Ahora, el estudio que se publica en el «European Respiratory Journal», indica que estas personas tienen cifras elevadas de ACE-2 en sus pulmones y, además, muestra que los niveles de ACE-2 en exfumadores son más bajos que en los fumadores.
«La información que tenemos de China sugiere que los pacientes con EPOC tienen un mayor riesgo de complicaciones si se infectan con COVID-19. Nosotros -asegura Janice Leung, de la Universidad de Columbia Británica y el Hospital St. Paul's, Vancouver (Canadá)-. Pensamos que esto podría deberse a que los niveles elevados de ACE-2 en sus vías respiratorias podrían facilitar que el virus infecte las vías respiratorias».
El equipo estudió muestras tomadas de los pulmones de 21 pacientes con EPOC y 21 personas que sin la enfermedad. Analizaron las muestras para medir el nivel de ACE-2 y compararon los datos con otros factores, como si fueran de personas que nunca había fumado, eran fumadores o ex fumadores. No solo encontraron niveles más altos de ACE-2 en pacientes con EPOC, sino que también en los fumadores.
A continuación, los investigadores compararon sus hallazgos con dos grupos de estudio existentes, que juntos contienen datos de otras 249 personas: no fumadores, fumadores actuales y exfumadores. De nuevo vieron que los niveles de ACE-2 eran más altos en los fumadores actuales pero más bajos en los no fumadores y en aquellos que eran exfumadores.
«Descubrimos que los pacientes con EPOC y los fumadores tienen niveles más altos de ACE-2 en sus vías respiratorias, lo que podría aumentar su riesgo de desarrollar infecciones graves por COVID-19. Los pacientes con EPOC deberían recibir asesoramiento, acatar estrictamente el distanciamiento social y la higiene adecuada de las manos para prevenir infecciones», señala la coordinadora de la investigación.
«También descubrimos que los ex fumadores tenían niveles similares de ACE-2 que las personas que nunca habían fumado. Esto sugiere que nunca ha habido un mejor momento para dejar de fumar para protegerse del COVID-19».
Para Tobias Welte, de la Sociedad Respiratoria Europea y es coordinador del grupo de trabajo nacional alemán COVID-19, que no participó en el estudio, «este estudio ofrece una idea interesante de por qué algunas personas pueden estar en riesgo de presentar síntomas de COVID-19 más graves que otras. Lo que no nos dice es si es posible manipular los niveles de ACE-2 para mejorar la supervivencia en pacientes infectados con COVID-19 o si esto supondría una diferencia en los pacientes con EPOC que contraen la infección».