La diabetes es una enfermedad muy grave. Seguir un tratamiento para la diabetes requiere de un compromiso permanente, pero tu esfuerzo vale la pena.
El integrante más importante de su equipo de cuidados de la salud es usted mismo, y es que gran parte del éxito de los tratamientos de la diabetes provienen de la disciplina, entendimiento y ganas de tener una normal y saludable.
No es fácil, pero recuerde que todo diagnóstico requiere aprender algo nuevo, no solo para el paciente, sino para todo el núcleo familiar, según lo confirma el Dr. Shantanu Nundy, MD, de Mary's Center, centro de atención médica y servicios sociales para familias de bajos ingresos en Washington, D.C.
De acuerdo a al experiencia del galeno, algunas personas creen que la diabetes "no es gran cosa" y otros creen que es una condena de muerte, por lo que es importante conocer los hechos.
"Como médicos, tratamos de corregir [las ideas equivocadas], pero la información que proviene de un familiar o amigo de confianza realmente tiene mucho peso," afirmó Nundy. "Si se controla, [la diabetes es] algo con lo que se puede llevar una vida larga y saludable."
De acuerdo a las recomendaciones del Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de los Estados Unidos, existen varios pasos para sobrellevar la enfermedad, por esa razón acá vamos a resumir las más destacadas.
1-. Aprenda sobre la diabetes.
¿Qué es la diabetes?
Hay tres tipos principales de diabetes:
Diabetes tipo 1 – Con este tipo de diabetes, el cuerpo no produce insulina. Esto es un problema porque el cuerpo necesita insulina para sacar el azúcar (glucosa) de los alimentos que la persona consume para convertirla en energía. Las personas que tienen diabetes tipo 1 deben tomar insulina todos los días para vivir.
Diabetes tipo 2 – Con este tipo de diabetes, el cuerpo no produce o no usa bien la insulina. Las personas con este tipo de diabetes tal vez necesiten tomar pastillas o insulina para ayudar a controlar la diabetes. La diabetes tipo 2 es la forma más común de diabetes.
Diabetes gestacional – Este tipo de diabetes ocurre en algunas mujeres cuando están embarazadas. La mayoría de las veces, desaparece después de que nace el bebé. Sin embargo, aun si desaparece, estas mujeres y sus hijos corren un mayor riesgo de desarrollar diabetes más adelante.
PASO 2: Conozca los factores clave de la diabetes.
Pregúntele a su equipo de cuidados de la salud qué puede hacer para controlar mejor el azúcar en la sangre, la presión arterial y el colesterol. Esto puede reducir su riesgo de sufrir un ataque al corazón o al cerebro u otros problemas relacionados con la diabetes.
El azúcar en la sangre y la prueba A1C
¿Qué es la prueba A1C?
La prueba A1C es un análisis de sangre que se usa para medir su nivel promedio de azúcar en la sangre durante los últimos 3 meses. Es diferente de los chequeos de azúcar en la sangre que usted se hace todos los días.
¿Por qué es importante?
Usted necesita conocer cuáles son sus niveles de azúcar en la sangre a lo largo del tiempo. No es bueno que esos números suban mucho. Los niveles altos de azúcar en la sangre pueden causarle daño al corazón, los vasos sanguíneos, los riñones, los pies y los ojos.
¿Cuál es el nivel ideal de la prueba A1C?
El nivel ideal para la mayoría de las personas con diabetes es menos de 7. Podría ser diferente para usted. Pregunte cuál debería ser el suyo.
La presión arterial
¿Qué es la presión arterial?
La presión arterial es la fuerza con la que la sangre empuja contra la pared de los vasos sanguíneos.
¿Por qué es importante?
Si la presión arterial está muy alta, el corazón tiene que trabajar demasiado. Esto puede causar un ataque al corazón o al cerebro y lesionarle los riñones y los ojos
¿Cuál es el nivel ideal de la presión arterial?
El nivel ideal para la mayoría de las personas con diabetes es menos de 140/90. Podría ser diferente para usted. Pregunte cuál debería ser el suyo.
El colesterol
¿Qué es el colesterol?
Hay dos tipos de colesterol en la sangre: LDL y HDL. El colesterol LDL o “malo” puede acumularse en los vasos sanguíneos y taparlos. Esto puede causar un ataque al corazón o al cerebro. El colesterol HDL o “bueno” ayuda a sacar el colesterol “malo” de los vasos sanguíneos.
¿Cuáles son los niveles ideales para el LDL y el HDL?
Pregunte en cuánto debería tener el colesterol. Su nivel ideal podría ser diferente al de otras personas. Si tiene más de 40 años de edad, tal vez tenga que tomar algún medicamento de estatina para la salud del corazón.
PASO 3: Aprenda a vivir con la diabetes.
Es normal sentirse agobiado, triste o enojado cuando se tiene diabetes. Tal vez usted sepa las medidas que tiene que tomar para mantenerse sano, pero se le hace difícil seguir el plan por mucho tiempo. Esta sección tiene consejos sobre cómo hacerle frente a la diabetes y cómo alimentarse bien y mantenerse activo.
Adicionalmente, especialistas coinciden en que otras medidas, que mencionaremos a continuación, son de gran ayuda para el paciente.
No fumar
Fumar aumenta el riesgo de padecer diabetes de tipo 2 y de sufrir diversas complicaciones relacionadas con la diabetes, incluidas:
*Disminución del flujo sanguíneo en las piernas y los pies, lo que puede provocar infecciones, úlceras y la posible extirpación de una parte del cuerpo por medio de cirugía (amputación)
*Enfermedad cardíaca
*Accidente cerebrovascular
*Enfermedad ocular, que puede causar ceguera
*Lesión a los nervios
*Enfermedad renal
*Muerte prematura
Habla con tu médico sobre los métodos para dejar de fumar o dejar de consumir otros tipos de tabaco.
Mantener tu presión arterial y tu colesterol bajo control
Al igual que la diabetes, la presión arterial alta (hipertensión arterial) puede dañar los vasos sanguíneos. El colesterol alto también es una preocupación, ya que el daño suele ser peor y más rápido cuando se tiene diabetes. Cuando estas afecciones se combinan, pueden provocar un ataque cardíaco, un accidente cerebrovascular u otras afecciones potencialmente mortales.
Consumir alimentos saludables y hacer ejercicio de forma regular puede ser de mucha ayuda para controlar la presión arterial alta y el colesterol. El médico también puede recomendar que tomes medicamentos recetados, si es necesario.
Programar exámenes físicos y oculares regulares
Hazte entre dos y cuatro controles de la diabetes por año, además de los exámenes físicos y oculares de rutina.
Durante el examen físico, el médico te preguntará por tu alimentación y por tu nivel de actividad física, y te revisará para detectar complicaciones relacionadas con la diabetes, como signos de daño renal, lesiones a los nervios y enfermedades cardíacas, así como otros problemas médicos.
El especialista en el cuidado de la vista controlará si hay signos de cataratas, de glaucoma y de daño en la retina.
Mantener tus vacunas al día
La diabetes te hace más propenso a contraer ciertas enfermedades. Las vacunas de rutina pueden ayudar a prevenirlas. Pregúntale al médico por las siguientes vacunas:
*Vacuna contra la influenza. Una aplicación anual de la vacuna contra la influenza puede ayudarte a permanecer saludable durante la temporada de influenza y a prevenir las complicaciones graves de esta infección.
*Vacuna contra la neumonía. A veces, solo se requiere una aplicación de la vacuna contra la neumonía. Sin embargo, si tienes complicaciones de la diabetes o tienes 65 años o más, es posible que necesites un refuerzo.
*Vacuna contra la hepatitis B. La vacuna contra la hepatitis B se recomienda para adultos con diabetes que no se hayan vacunado antes y tengan menos de 60 años. Si tienes 60 años o más y nunca te has aplicado esta vacuna, consúltale al médico si deberías hacerlo.
*Otras vacunas. Mantén la vacuna contra el tétanos al día (por lo general, se aplica cada 10 años). El médico también puede recomendarte otras vacunas.
Cuídado de los dientes
La diabetes puede aumentar tus probabilidades de contraer infecciones en las encías. Cepíllate los dientes al menos dos veces por día con un dentífrico con flúor, usa hilo dental una vez al día y programa exámenes dentales, por lo menos, dos veces al año. Llama al dentista si tienes sangrado, enrojecimiento o hinchazón en las encías.
Atención a los pies
Los niveles altos de azúcar en sangre pueden disminuir el flujo sanguíneo y dañar los nervios de los pies. Si no se tratan, las heridas y las ampollas pueden provocar infecciones graves. La diabetes puede causar dolor, hormigueo o pérdida de la sensibilidad en los pies.
Para prevenir problemas en los pies, haz lo siguiente:
*Lávate los pies diariamente con agua tibia. Evita sumergir los pies, ya que eso puede secar la piel.
*Sécate los pies con suavidad, especialmente entre los dedos.
*Humecta los pies y los tobillos con una loción o con vaselina. No te coloques aceites ni cremas entre los dedos, ya que la humedad extra puede provocar infecciones.
*Revísate los pies diariamente para ver si tienes callosidades, ampollas, llagas, enrojecimiento o hinchazón.
*Consúltale al médico si tienes una llaga u otro problema de pies que no se empieza a curar dentro de unos días. Si tienes una úlcera en el pie, una llaga abierta, consulta al médico de inmediato.
*No camines descalzo en interiores ni en exteriores.
Disminuir el consumo de alcohol
El alcohol puede subir o bajar la glucosa en sangre, según la cantidad que bebas y si comes al mismo tiempo. Si decides beber, hazlo solamente con moderación; esto significa no más de una bebida por día para las mujeres de todas las edades y hombres mayores de 65 años y dos bebidas al día para los hombres de hasta 65 años inclusive.
Siempre bebe en las comidas o junto con un refrigerio y recuerda incluir las calorías de todas las bebidas alcohólicas que consumas en tu cálculo diario de calorías. Asimismo, ten presente que el alcohol, más tarde, puede bajar la glucosa en sangre, en especial en personas que utilizan insulina.
Tomar el estrés en serio
Si tienes estrés, es fácil descuidar tu rutina habitual de cuidado de la diabetes. Para controlar el estrés, establece límites. Prioriza tus tareas. Aprende técnicas de relajación.
Duerme mucho. Ante todo, mantén una actitud positiva. El cuidado de la diabetes está bajo tu control. Si estás dispuesto a hacer tu parte, la diabetes no se interpondrá en el camino de una vida activa y saludable.