La Enfermedad Inflamatoria del Intestino (EII), que engloba afecciones como la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, afecta a millones de personas a nivel mundial.
Esta patología crónica causa inflamación en el tracto digestivo y, si no se maneja adecuadamente, puede tener un impacto significativo en la calidad de vida.
En una conversación exclusiva de la revista Medicina y Salud Pública con el Dr. Kermit Richiez, gastroenterólogo y presidente de la Asociación Puertorriqueña de Gastroenterología, abordó información clave sobre la Enfermedad Inflamatoria del Intestino, abordó sus síntomas, diagnóstico y opciones de tratamiento es fundamental para su manejo efectivo
La Enfermedad Inflamatoria del Intestino se refiere a un grupo de trastornos crónicos que implican la inflamación del tracto gastrointestinal.
Las formas más comunes son la enfermedad de Crohn, que puede afectar cualquier parte del tracto digestivo, y la colitis ulcerosa, que generalmente afecta al colon y al recto.
Como explica el Dr. Kermit, "la enfermedad inflamatoria del intestino representa una enfermedad bastante seria que afecta tanto a niños como a adultos. Existen dos condiciones principales que caen bajo esta clasificación.
"Una de ellas es la enfermedad de Crohn y la otra es la colitis ulcerativa. Las dos se parecen grandemente pero tienen grandes diferencias. La colitis ulcerativa, como dice el nombre, solo afecta al colon, mientras que en la enfermedad de Crohn puede afectar todo el intestino, que puede ir desde la boca hasta el ano". Continúa.
La enfermedad de Crohn, a diferencia de la colitis ulcerativa, puede afectar cualquier parte del tracto digestivo, lo que la hace más difícil de tratar y conlleva un mayor riesgo de complicaciones graves.
"La enfermedad de Crohn suele ser algo un poquito más difícil de tratar y suele tener mayores complicaciones", añade el Dr. Richiez.
Causas y factores de riesgo
Aunque no se conoce una causa exacta de la EII, se considera que una combinación de factores genéticos, inmunológicos y ambientales pueden contribuir a su desarrollo.
Las personas con antecedentes familiares de EII tienen un riesgo mayor de padecer la enfermedad. Además, factores como infecciones gastrointestinales previas o el consumo de ciertos medicamentos pueden desencadenar episodios inflamatorios.
Síntomas comunes de la Enfermedad Inflamatoria del Intestino
Los síntomas varían según el tipo y la gravedad de la enfermedad, pero los más comunes incluyen:
Dolor abdominal y cólicos
Diarrea persistente, a veces con sangre
Pérdida de peso no explicada
Fiebre
Pérdida de apetito
El Dr. Richiez destaca que los síntomas clave para sospechar de una EII son "dolor abdominal, diarrea y sangrado rectal". Agrega que "cualquier persona que tenga estos tres síntomas debe ser evaluada por un gastroenterólogo".
En casos más graves, las complicaciones pueden incluir obstrucción intestinal, sangrado severo, o incluso perforación del intestino. Si no se trata adecuadamente, la enfermedad de Crohn puede resultar en consecuencias graves.
"Las consecuencias de no tratar la enfermedad inflamatoria del intestino pueden ser terribles", alerta el Dr. Richiez. Entre las complicaciones se incluyen infecciones graves, abscesos abdominales, y en algunos casos, incluso la muerte.
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Diagnóstico y manejo médico
El diagnóstico de la EII se realiza mediante una combinación de historia clínica, pruebas de laboratorio, endoscopia y análisis de imágenes. La colonoscopia es una de las herramientas clave, ya que permite visualizar el interior del colon y tomar muestras de tejido para análisis.
El tratamiento varía según la gravedad de la enfermedad e incluye medicamentos antiinflamatorios, inmunosupresores y, en casos más graves, cirugía. Además, los cambios en la dieta y un manejo adecuado del estrés pueden ser factores importantes en el control de la enfermedad.
El Dr. Richiez enfatiza la importancia de la adherencia al tratamiento, indicando que "todo paciente que tenga estos síntomas debe ser evaluado por un gastroenterólogo y debe ser atendido y adherirse al tratamiento para evitar las complicaciones a largo plazo".
Avances en la investigación y el tratamiento
La medicina ha avanzado significativamente en el tratamiento de la EII, con terapias biológicas que ofrecen nuevas esperanzas a los pacientes. Estas terapias actúan sobre las células inmunológicas del cuerpo, reduciendo la inflamación y mejorando la calidad de vida de quienes padecen la enfermedad.
La investigación continúa siendo crucial para comprender mejor las causas subyacentes de la EII y desarrollar tratamientos más efectivos y personalizados.