El tratamiento diario con medicamentos orales es el más recetado para la esquizofrenia, a pesar de los problemas de adherencia.
La conversación en torno a la salud mental ha avanzado considerablemente en los últimos años, con un reconocimiento y aceptación crecientes tanto de los pacientes como de los profesionales de la salud. Sin embargo, en el caso de la esquizofrenia, muchos pacientes aún no conocen todas las opciones de tratamiento disponibles.
Esta falta de concienciación, junto con estigmas y barreras sociales o geográficas, dificulta el acceso al tratamiento adecuado. Los profesionales de la salud deben estar informados sobre las opciones de dosificación menos frecuentes para poder ofrecer a sus pacientes decisiones terapéuticas más informadas.
Millones de adultos en los Estados Unidos viven con esquizofrenia, una enfermedad cerebral compleja que puede afectar todos los aspectos de la vida cotidiana. La esquizofrenia puede provocar distorsiones en el pensamiento, las percepciones y el comportamiento, afectando desde las relaciones personales hasta la vida profesional.
Sin un tratamiento adecuado, los síntomas pueden dificultar incluso las tareas más sencillas. La falta de cumplimiento con el tratamiento diario, ya sea por estigma o por olvido, es un problema común entre los pacientes con esquizofrenia, agravado por la naturaleza de la enfermedad y la falta de apoyo social.
El tratamiento diario con medicamentos orales es el más recetado para la esquizofrenia, a pesar de los problemas de cumplimiento. En situaciones de crisis, los profesionales de la salud recurren a antipsicóticos inyectables de acción rápida, lo cual puede asociarse a experiencias negativas para los pacientes.
Sin embargo, existen alternativas como los inyectables de larga duración (LAI), que se administran con menos frecuencia y pueden ayudar a los pacientes a mantener el control de su tratamiento. Estos inyectables son administrados por profesionales de la salud, lo que asegura un seguimiento más riguroso del tratamiento.
Patrick, un paciente con esquizofrenia, enfrentó dificultades con los tratamientos orales. Con la ayuda de su familia y un equipo de salud, Patrick comenzó a recibir inyectables de larga duración, lo que mejoró significativamente sus síntomas.
Este tipo de tratamiento le permitió recuperar su estabilidad e independencia, administrando su medicamento solo unas pocas veces al año.
Johnson & Johnson ofrece algunas de las opciones de tratamiento más recientes para la esquizofrenia, como INVEGA HAFYERA® (palmitato de paliperidona de 6 meses). Este medicamento se aprobó tras un estudio fundamental que demostró su eficacia comparable a INVEGA TRINZA® (palmitato de paliperidona de 3 meses).
La mayoría de los pacientes en el estudio no experimentaron recaídas y pudieron mantener el tratamiento durante dos años. Los efectos secundarios más comunes incluyeron reacciones en el lugar de la inyección, aumento de peso y dolor de cabeza.
El Dr. Gus Alva, psiquiatra y médico de Patrick, destaca los beneficios de los inyectables de larga duración para sus pacientes. Según él, estos tratamientos permiten crear planes integrales que consideran los aspectos sociales, emocionales y físicos de la vida del paciente. Patrick ha podido centrarse en sus intereses y su educación, experimentando una mejora constante en su salud mental y física.
Para los pacientes adultos con esquizofrenia, especialmente aquellos recién diagnosticados o que han probado varios tratamientos, es fundamental discutir con su profesional de salud las opciones de inyectables de larga duración como INVEGA HAFYERA®. Con el apoyo adecuado, vivir una vida plena y estable es posible.
Para más información sobre los inyectables de larga duración de Johnson & Johnson, visite JanssenLAIs.com.
