La aprobación de la segunda dosis de refuerzo está autorizada en adultos mayores de 50 años y personas inmunocomprometidas de 12 años o más.
La medida amplía la disponibilidad de refuerzos adicionales para adultos mayores sanos.
Este estudio examinó las infecciones intercurrentes, las hospitalizaciones y la mortalidad en una población general para estas 2 vacunas durante el período Delta.
Pacientes inmunocomprometidos en Puerto Rico y en otros países han comenzado a recibir una cuarta dosis contra el coronavirus.
Una investigación de los CDC concluyó que la dosis de refuerzo de las vacunas de Pfizer y Moderna pierde efectividad tras 4 meses, pero aun así protege de la hospitalización.
Los estudios indican que los refuerzos de las vacunas neutralizan la variante.
La vacuna cuenta con protección de 90% contra la infección sintomática confirmada por laboratorio.
Las tasas de miocarditis y pericarditis fueron más altas entre los varones jóvenes después de la segunda dosis, según estudio.
Los resultados indican que los trastornos asociados a las vacunas de AstraZeneca y Pfizer son raros.
Investigadores han visto que los sobrevivientes del SARS-CoV-1 de 2003 vacunados contra la covid, generan anticuerpos frente al SARS-CoV-2 y otros coronavirus.