Hoy celebramos no solo al profesional, sino al hombre de familia que ha sabido cultivar valores, tradiciones y un profundo sentido de pertenencia en sus hijos, demostrando que la verdadera salud pública, como él bien dice, comienza en el hogar.
Por: Katherine Ardila
El Dr. Juan Carlos Orengo Valverde, es el vivo ejemplo de un profesional que ha logrado equilibrar una destacada trayectoria en la salud pública de Puerto Rico con dedicación a la vida familiar.
Natural de Gandía, Valencia, este médico formado en la Universidad de Navarra ha construido una carrera notable que abarca tres décadas y dos continentes. Ha desempeñado roles importantes en el ámbito de la epidemiología, incluyendo posiciones de liderazgo en el Departamento de Salud de Puerto Rico y en la academia.
"Tenemos diferentes disciplinas, como la salud pública general, que va dirigido más a la parte de promoción, políticas de salud pública y planes estratégicos", explica el experto sobre su enfoque profesional.
Una historia de amor y familia
En 1997, con dos hijos pequeños (Javier y Arantza), la familia emprendió un nuevo reto: trasladarse a Las Palmas de Gran Canaria para que ambos pudieran completar sus doctorados.
Su conexión con Puerto Rico se remonta a 1989, cuando llegó desde España para realizar una maestría en epidemiología. Fue en el Recinto de Ciencias Médicas donde conoció a la Dra. Vivian Green, su actual esposa. "Yo era 'room mate' del hermano de la doctora Vivian cuando estudiábamos en España. Vine a Puerto Rico en el 1989... y la conocí. Estudiamos juntos", relata el Dr. Orengo.
La pareja, que se casó en 1991, ha construido una familia multicultural. En 1997, con dos hijos pequeños (Javier y Arantza), emprendieron un nuevo reto: trasladarse a Las Palmas de Gran Canaria para que ambos pudieran completar sus doctorados. Al regresar a Puerto Rico en 2001, trajeron consigo a su tercera hija, Alexia.
Salud pública como estilo de vida
Para el Dr. Orengo, los conceptos de salud pública trascienden lo profesional. "Ir a un museo es salud pública. Caminar 20 minutos diarios, ir a la playa a disfrutar del agua y la arena, disfrutar el paisaje, eso es salud pública", afirma el epidemiólogo, quien ha inculcado estos valores en sus tres hijos.
La familia ha mantenido vivas sus raíces españolas mientras se integraba plenamente a la vida puertorriqueña. "El vecindario sabe cuándo hay juegos de fútbol, porque frente a la casa, entre las dos palmeras se amarra una banderita", comenta la Dra. Green sobre una de sus tradiciones familiares.
Balance entre profesión y paternidad
En este Día del Padre, la historia del Dr. Orengo nos muestra que la verdadera paternidad se construye con presencia, valores compartidos y el ejemplo diario. Su vida profesional dedicada a mejorar la salud pública y su compromiso familiar son testimonio de que el éxito se mide tanto en los logros profesionales como en la calidad de las relaciones humanas.
"La familia siempre ha ido junta", señala el experto, quien junto a su esposa priorizó siempre incluir a sus hijos en sus actividades.
Hoy celebramos no solo al profesional, sino al hombre de familia que ha sabido cultivar valores, tradiciones y un profundo sentido de pertenencia en sus hijos, demostrando que la verdadera salud pública, como él bien dice, comienza en el hogar.