"Uno se quita el sombrero de profesional de la salud y dice: ¿Qué tengo que hacer como paciente?"

La historia de la Lcda. Wanda González, nutricionista y paciente de esclerosis múltiple es un recordatorio de que, con el apoyo adecuado y adherencia a los tratamientos, es posible vivir una vida plena y exitosa.

Por: Katherine Ardila


La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad crónica del sistema nervioso central que afecta el cerebro y la médula espinal. Se caracteriza por la aparición de lesiones inflamatorias en la mielina, la sustancia que recubre y protege las fibras nerviosas, y en los propios nervios. Esta desmielinización interfiere con la capacidad de los nervios para transmitir impulsos eléctricos desde y hacia el cerebro, lo que provoca una amplia variedad de síntomas.

En Puerto Rico, la historia de la Lcda. Wanda González, una nutricionista dietista destacada, paciente de esclerosis múltiple, es un testimonio poderoso de resiliencia y éxito profesional al atravesar desafíos de la salud y afrontarlos con la mayor dedicación sin dejar su vida personal y profesional de lado.

Adormecimiento en un lado del cuerpo y alteración de la percepción de temperaturas: Síntomas de alerta

La vida de la Lcda. Wanda dio un giro inesperado en septiembre de 2020, en plena pandemia. "Empiezo a experimentar diferentes síntomas, entre ellos, un adormecimiento en todo el lado derecho. La percepción de temperaturas era totalmente diferente, en un lado sentía más frío, en otro más calor," relata. La dificultad para realizar tareas cotidianas, como hacer un moño, fue una señal clara de que algo no estaba bien. Tras consultar a varios especialistas, finalmente un MRI reveló la presencia de lesiones, confirmando el diagnóstico de esclerosis múltiple.

Desde el diagnóstico, la Lcda. Wanda ha adoptado un enfoque proactivo en su tratamiento. "Y ahí simplemente decidí empezar a buscar todas esas cosas que como paciente podía hacer dentro de estilos de vida, alimentación, modificaciones, que me ayudaran a que ese tratamiento fuera lo más efectivo posible" explica. "Uno se quita el sombrero de profesional de la salud y uno dice, bueno, ¿Qué tengo que hacer como paciente?". Bajo la guía de su neuróloga, inició un tratamiento adecuado y complementó con cambios significativos en su estilo de vida.

Desafíos en la vida cotidiana 

La esclerosis múltiple, conocida como "la enfermedad de las mil caras", se manifiesta de formas únicas en cada individuo. En el caso de Wanda, la enfermedad afectó principalmente su lado izquierdo, causando entumecimiento y debilidad. "Se me dificultaba lo que era el balance, la coordinación, el quizás subir la escalera, yo tenía que levantar la pierna para poder subirla porque el lado izquierdo estaba totalmente adormecido y el derecho estaba debilitado," comenta.

 Además, experimentó una exacerbación de los síntomas debido a la temperatura, "quizás en el derecho sentía esa hipersensibilidad a lo que era el frío a lo que era el calor, quizás un lado estaba sudando, el otro lado no".

A pesar de estos desafíos, ha continuado su carrera con determinación y éxito. "Wanda es nuestra nutricionista en el programa, es una dietista, nutricionista muy exitosa, que ha logrado muchísimas cosas", destaca uno de sus colegas, el Dr. Oscar Soto. Su historia no solo es un testimonio de superación personal, sino también un ejemplo inspirador para otros pacientes.

Es importante crear conciencia y apoyo para las personas que padecen estas condiciones 

Wanda también hace hincapié en la importancia de hablar abiertamente sobre la esclerosis múltiple y sus síntomas, visibles e invisibles. "Es importante que se hable porque a veces hay pacientes que no se atreven a decirlo." señala. "Me han llegado pacientes que tienen el diagnóstico pero su sintomatología no es visible y pues la gente quizás no los entiende y piensan que están exagerando". 

Enfrentar el estigma y buscar apoyo adecuado es crucial para manejar la condición y mejorar la calidad de vida.

Una historia de éxito

Hoy, Wanda sigue adelante con su vida, equilibrando su carrera profesional con los desafíos de su condición. Su historia es un recordatorio de que, con el apoyo adecuado y una adherencia a los tratamientos, es posible vivir una vida plena y exitosa, incluso con una enfermedad crónica como la esclerosis múltiple.

La historia de Wanda González es un faro de esperanza y motivación para muchos, mostrando que, a pesar de las adversidades, se puede alcanzar el éxito y la satisfacción personal.



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