Los excesos navideños y los alimentos ultraprocesados pueden desencadenar crisis peligrosas en personas con enfermedades crónicas; la clave es moderación, ejercicio y mantener los tratamientos sin interrupciones.
Por: Katherine Ardila
Con la llegada de diciembre, los excesos en la alimentación y los cambios en las rutinas de cuidado personal se convierten en una preocupación para los especialistas en salud. En un diálogo exclusivo con la revista Medicina y Salud Pública, la Dra. Wendy Rosario, médico familiar y Presidenta de la Sociedad de Medicina Familiar en República Dominicana, explicó cómo disfrutar las festividades sin descuidar el bienestar:
La especialista comenzó definiendo el enfoque de su disciplina: "Medicina familiar es una especialidad médica que tiene como objetivo principal y fundamento la prevención en salud, el control de las enfermedades y el seguimiento cuando ya existe una condición".
Añadió que "nuestro objetivo principal es dar una asistencia personalizada, humanizada a los pacientes con el objetivo de prevenir enfermedades crónicas, enfermedades respiratorias, también enfermedades agudas o cualquier patología que pueda presentar el paciente".
Este modelo de atención se vuelve valioso durante las festividades, pues permite recomendaciones personalizadas. La Dra. Rosario destacó que "en medicina familiar tenemos ese, vamos a decir, ese plus y es que al conocer la familia y al conocer al paciente bien, podemos identificar cuáles condiciones va a sufrir y asociar el tipo de alimentación que debe llevar".
¿Cómo alimentarse correctamente en épocas festivas?Frente a las mesas navideñas cargadas de tradición y tentación, la doctora recomienda una mirada realista. "Para el tema de la alimentación, nosotros tendemos a limitar el tema del consumo de alimentos hiperprocesados, que siempre debe ser una media, vamos a decir, una cantidad promedio de consumo, para no decir que ninguna, porque a veces es imposible, pero limitarlo lo más posible", afirmó.
Esta recomendación es especialmente importante para pacientes con condiciones crónicas, como la diabetes o la hipertensión, ya que "son pacientes que viven con esta condición, que de por sí su metabolismo y su condición de base predispone a la aparición de eventos catastróficos, eventos cerebrovasculares, eventos peligrosos".
¿Hay un consumo "mínimo" de alcohol seguro?Sobre el consumo de bebidas alcohólicas, la posición médica es clara: "Lo recomendable es cero alcohol". Sin embargo, comprendiendo la realidad social, la Dra. Rosario sugiere un manejo consciente: "Ahora, si va a tomar alcohol, bueno, una copa de vino, una copa, no dos botellas, todo debe ser medido".
La especialista alertó sobre el peligro de la acumulación en múltiples eventos sociales: "si usted se va a juntar este viernes con un grupo de trabajo, porque tienen un compartido, usted se va a beber y si el sábado se puede juntar también y va a beber, eso no es una copa sola, ahí es donde debe tener autocontrol". Y recordó una verdad fundamental: "ese hígado va a seguir con usted y todo el sistema durante lo que tengamos de vida".
Los cuatro abandonos peligrososDurante la conversación, ambos médicos identificaron un patrón preocupante en el comportamiento de los pacientes durante diciembre.
El Dr. Carreño inició la enumeración: "los pacientes en las festividades detienen algunas cosas. ¿Qué detienen? Los chequeos preventivos. Sí. Yo no me voy a chequear en diciembre porque yo no quiero que me descubran una cosa y me digan que ya no puedo comer. Y otra cosa que detienen es los ejercicios porque yo arranco en enero".
A estas conductas, la Dra. Rosario agregó: "Suspenden los medicamentos en ocasiones porque voy a beber y suspenden la actividad física, los medicamentos, descontrolan la alimentación totalmente y suspenden los seguimientos y las atenciones".
"Estadísticamente, por eso es que tenemos más eventualidades. Tenemos esos picos de incidencias, tenemos diabéticos en emergencia, tenemos personas hipertensas con infarto".
Ejercicio, alimentación y medicación: más necesarios que nuncaFrente a la tendencia de abandonar la actividad física, la Dra. Rosario fue muy contundente con su recomendación: "no hay por qué parar los ejercicios porque sea diciembre".
"De hecho pienso que deberían ser los meses donde hagamos más ejercicio. ¿Por qué? Porque es donde hay un aumento de consumo de alimentos que puede producir cambios en el metabolismo y en el físico". Como incentivo adicional, mencionó: "Incluso en los gimnasios está más cómodo, hay menos personas, hay menos gente".
Como cierre, ambos especialistas enfatizaron uno de los errores más peligrosos: la suspensión de medicamentos para consumir alcohol. La Dra. Rosario fue clara: "Nunca, nunca, nunca vamos a decir suspender un medicamento de un paciente con una condición crónica, a menos que sea una recomendación médica justificada".
Y aclaró un punto crucial: "hay medicamentos que están contraindicados con el alcohol. Exacto. Existe. Pero la contraindicación es el alcohol, no el medicamento". Esta distinción puede marcar la diferencia entre unas fiestas disfrutables y un evento catastrófico para la salud.
La recomendación final de los especialistas es disfrutar las festividades con conciencia, mantener las rutinas de cuidado y recordar que la salud es un regalo que debe preservarse durante todo el año.