El retinoide alitretinoína muestra mayor eficacia y mejor adherencia en comparación con el tratamiento de la fototerapia, aunque con un aumento en la tasa de eventos adversos.
Por: Laura Guio
El eccema grave de las manos, también conocido como dermatitis de las manos, es una condición inflamatoria crónica que afecta la piel de las manos. Sus síntomas incluyen enrojecimiento, inflamación, picazón intensa, sequedad y descamación, ampollas o vesículas, piel gruesa y endurecida, fisuras y grietas.
Esta condición puede estar relacionada con una variación genética que debilita la capacidad de protección de la piel, haciéndola más vulnerable a: Pérdida de humedad, bacterias, irritantes. alérgenos, factores medioambientales (como el humo del tabaco).
Algunos otros desencadenantes son condiciones médicas como asma o eccema atópico, factores genéticos y estrés. Esto impide que la piel realice su función protectora, aumentando el riesgo de desarrollar dermatitis atópica.
Para prevenir el eccema de las manos, se recomienda usar guantes protectores, evitar sustancias irritantes, mantener la piel hidratada y realizar cambios en el estilo de vida para reducir el estrés y la ansiedad.
Tratamientos convencionales para tratar el eccema en manos
El tratamiento de la condición puede comenzar con la humectación regular de la piel y otros hábitos de cuidado personal. Si esto no da resultado, el proveedor de atención médica podría recomendar cremas medicinales para controlar la comezón y ayudar a reparar la piel. Algunas veces, se combinan con otros tratamientos, el más conocido es la fototerapia.
La fototerapia es un tratamiento para la dermatitis que utiliza luz solar natural o artificial (UV A y B) para tratar casos resistentes a tratamientos tópicos y prevenir brotes rápidos. Sin embargo, su uso a largo plazo conlleva efectos secundarios como envejecimiento prematuro de la piel, hiperpigmentación y aumento del riesgo de cáncer de piel.
Por este motivo, no se recomienda para niños pequeños ni bebés. Es importante evaluar las ventajas y desventajas de la fototerapia con un profesional médico antes de iniciar el tratamiento.
Investigación sobre la eficacia del alitretinoína
Un reciente estudio comparativo ha revelado que el retinoide alitretinoína es más efectivo que la fototerapia para el tratamiento del eccema crónico grave de las manos, según los resultados del ensayo ALPHA, que involucró a 441 pacientes en el Reino Unido.
El ensayo, llevado a cabo en consultas ambulatorias de dermatología, asignó a los participantes a recibir alitretinoína a una dosis de 30 mg/día o a someterse a fototerapia con psoraleno y luz ultravioleta A (PUVA) dos veces por semana durante un periodo de 12 a 24 semanas.
El criterio principal de valoración fue la gravedad del eccema, medida mediante un índice específico.
Los resultados mostraron que, a las 12 semanas, el cambio medio en la gravedad del eccema fue significativamente mayor en el grupo que recibió alitretinoína, con una reducción del 50% en comparación con el 30% en el grupo de fototerapia.
Aunque no hubo diferencias significativas entre los grupos a las 24 o 52 semanas, la adherencia al tratamiento fue notablemente superior en quienes tomaron el retinoide, alcanzando un 65,9% frente al 24,0% de la fototerapia.
Efectos secundarios del tratamiento
Un estudio liderado por la Dra. Miriam Wittmann de la Universidad de Leeds encontró que el alitretinoína es más eficaz y actúa más rápido que la fototerapia para tratar la dermatitis, aunque tiene una tasa más alta de eventos adversos (25% vs 10,9%).
Sin embargo, la gravedad de estos eventos fue similar en ambos grupos. Los autores resaltan la importancia de mejorar el acceso a tratamientos efectivos para pacientes que no responden a las terapias convencionales, dado que la fototerapia tiene limitaciones en su disponibilidad en el Reino Unido.
El estudio ALPHA revela que la alitretinoína es más efectiva y tiene mejor adherencia para tratar el eccema grave de las manos, aunque con riesgo de eventos adversos. Los expertos destacan la necesidad de: Investigación continua, acceso a tratamientos innovadores y el seguimiento adecuado de la condición.
Estos resultados pueden conducir a cambios en las pautas de tratamiento y mejorar la calidad de vida de quienes sufren de eccema grave de las manos.