En una alerta dirigida a expertos, la Dra. Debar detalla la diferencia entre el estrés positivo y negativo, así como las señales de alerta que indican un posible exceso de estrés.
Por: María Camila Sánchez
Contrario a la creencia común, no todo el estrés es perjudicial desde una perspectiva médica. Según la doctora Safia Debar, especialista en manejo del estrés de Mayo Clinic Healthcare en Londres, niveles saludables de estrés contribuyen al desarrollo de la resiliencia.
El estrés crónico puede afectar negativamente el cuerpo, la mente y las relacionesEl estrés es una respuesta física y psicológica a la demanda, explica la Dra. Debar. Mientras que el "eustrés" puede generar una sensación de bienestar, el estrés crónico puede afectar negativamente todos los sistemas del cuerpo, provocando ansiedad, depresión y problemas digestivos.
La Dra. Debar destaca "la importancia de reconocer los signos de estrés y cómo afecta a nivel emocional, físico y en las relaciones interpersonales. Animar a las personas a reflexionar sobre cómo manejan el estrés puede ser el primer paso para abordar sus efectos".
La Dra. Debar señala que el estrés desencadena una serie de reacciones en el cuerpo, desde la activación del sistema nervioso simpático hasta la preparación del cuerpo para luchar o huir. Sin embargo, cuando la amenaza ha pasado, el cuerpo inicia el proceso de reparación y renovación.
"No hay desgaste natural ni daños si el estrés sube y luego vuelve a bajar", afirma la Dra. Debar. Sin embargo, el estrés crónico puede llevar a una disminución en la capacidad del cuerpo para recuperarse, lo que puede resultar en fatiga, ansiedad y una respuesta inadecuada a los factores estresantes.
Señales de advertencia de exceso de estrés
La Dra. Debar advierte sobre señales de advertencia que podrían indicar una sobrecarga de estrés, como sentir el estrés de forma constante, tener dificultades para regular las emociones o experimentar síntomas físicos como dolores de cabeza o malestar estomacal.
El estrés crónico puede tener efectos a largo plazo en la salud, advierte la Dra. Debar. Aquellos que experimentan síntomas físicos persistentes o no encuentran alivio con cambios en el estilo de vida deben buscar orientación médica para identificar y abordar adecuadamente las causas subyacentes del estrés.
La Dra. Debar enfatiza que "entender la diferencia entre el estrés positivo y negativo es fundamental para mantener un equilibrio saludable. Mientras que el "eustrés" puede ser beneficioso para el crecimiento personal y la resiliencia, el estrés crónico puede tener un impacto negativo en la salud física y mental".
Estos son algunos de los cambios físicos que pueden desencadenarse al enfrentar una amenaza:
El sistema nervioso simpático se activa, desencadenando la liberación de cortisol, la principal hormona del estrés.
Los pensamientos tienden a volverse negativos cuando se atraviesa una situación difícil o se anticipa una adversidad, mientras que la atención se enfoca intensamente en lo que está ocurriendo.
El corazón, los pulmones y los músculos se preparan para la acción, aumentando la frecuencia cardíaca, la presión arterial y la respiración para proporcionar más oxígeno a las células. Los músculos se tensan en preparación para la lucha o la huida.
Las funciones del sistema digestivo y reproductivo se ralentizan, ya que no son necesarias durante la respuesta al estrés.
El sistema inmunológico disminuye su atención en combatir microorganismos invasores, como virus o células cancerosas, y entra en un estado inflamatorio, aumentando la producción de citocinas para regular este proceso.
Una vez que la amenaza ha pasado, el cuerpo comienza a recuperarse y a regresar a un estado de equilibrio. La respiración y el ritmo cardíaco se vuelven más lentos, la presión arterial se normaliza y los músculos se relajan. Los sistemas digestivo y reproductivo reanudan su actividad normal, y es posible que la persona sienta una mayor conexión con los demás al compartir su experiencia.
Es importante reconocer los signos de estrés y aprender a manejarlo de manera efectiva
La Dra. Debar concluye enfatizando en "la importancia de abordar el estrés de manera proactiva y buscar apoyo cuando sea necesario. Reconocer los signos de estrés y aprender a manejarlo de manera efectiva puede marcar una gran diferencia en la salud y el bienestar a largo plazo".
Para aquellos que experimentan síntomas físicos continuos o no encuentran alivio con cambios en el estilo de vida, la Dra. Debar recomienda consultar con un equipo de atención médica.
Consulte la fuente aquí.