Durante el embarazo, la caída del cabello puede ser causada por diversos factores, incluyendo la alimentación, el estrés y, especialmente, los cambios hormonales.
El cambio hormonal que se presenta durante la gestación genera distintas alteraciones en todo el cuerpo, de manera que algunas algunas mujeres pierden más cabello que el que perdían antes del embarazo, como también, hay mujeres que notan que, incluso, les crece más rápido
Y es que es completamente normal que se presenten este tipo de alteraciones, y puede ser, también, que este fenómeno desaparezca a medida que avanza la gestación.
Durante el primer trimestre del periodo de gestación, la progesterona suele generar el cabello más débil, opaco y se cae con mayor facilidad. A medida que incrementan los estrógenos en el proceso, aproximadamente para el segundo trimestre, la situación mejorará.
Sin embargo, aquí te dejamos algunos consejos para evitar esta situación tanto como se pueda:
- Debes usar la menor cantidad posible de champú y acondicionadores, y no someterte a ningún tratamiento anticaída, pues algunos de sus componentes pueden ser perjudiciales en el embarazo.
- Aliméntate con productos ricos en biotina, arginina, metionina, cistina, vitaminas, hierro, calcio y zinc. De este modo, mejorará la apariencia del cabello e incluso pueda retardar la caída.
- Lávate el pelo utilizando la temperatura del agua templada. La recomendación general para fortalecer el cuero cabelludo es dar un breve chorro de agua fría en la raíz al finalizar el baño.
Algunas mujeres experimentan, también, la caída del cabello luego del parto. Esto se debe al déficit de micronutrientes, el nivel de progesterona y el aumento de cortísol.
Ante esta situación, lo más importante es mantener la calma, pues para nadie es un secreto que el estrés es uno de los grandes causantes de la pérdida de cabello.