El tabaquismo es el principal factor de riesgo ambiental modificable para la Degeneración Macular Asociada a la Edad, una enfermedad degenerativa que daña la mácula, crucial para la visión central y la agudeza visual.
Por: Valery Cardozo
El humo del tabaco contiene miles de compuestos químicos, muchos de los cuales son cancerígenos. Aunque el cáncer de pulmón es ampliamente conocido como una de las principales consecuencias del tabaquismo, este hábito también está asociado a enfermedades oculares graves.
El riesgo aumentado de Degeneración Macular Asociada a la Edad en fumadores y su relación con la genéticaSegún el Dr. José María Ruiz Moreno de IMO Grupo Miranza en Madrid, los fumadores tienen un riesgo 2.4 veces mayor de desarrollar DMAE (Degeneración Macular Asociada a la Edad), comparado con los no fumadores, y este riesgo puede aumentar hasta 34 veces si hay predisposición genética.
La DMAE se agrava debido a la oxidación celular y la constricción de los vasos sanguíneos que provoca el tabaco, afectando especialmente los delicados capilares de la mácula.
Retinopatía diabética
El tabaco también empeora la retinopatía diabética, una enfermedad que afecta los vasos sanguíneos de la retina y puede causar hemorragias y pérdida de visión. Fumar puede marcar la diferencia entre una retinopatía leve y una avanzada, aumentando el riesgo de complicaciones como el edema macular diabético y la aparición de neovasos que pueden llevar a desprendimientos de retina y hemorragias vítreas.
Otros problemas visuales relacionados con el tabaquismo
Ojo seco: Fumar puede causar ojo seco, una condición donde los ojos no producen suficientes lágrimas, causando irritación y molestias.
Envejecimiento de la piel: El tabaco acelera el envejecimiento de la piel alrededor de los ojos, provocando arrugas y bolsas que pueden afectar la visión si los párpados caen demasiado. En estos casos, la blefaroplastia puede ser una solución, siempre realizada por cirujanos oculoplásticos que respeten la anatomía y funcionalidad ocular.
El grupo Miranza enfatiza la necesidad de sensibilizar sobre los peligros del tabaquismo para la salud visual y urge a los fumadores a dejar el hábito. La prevención y la educación son claves para proteger la vista y mejorar la calidad de vida.
Consulte la fuente aquí.