El fármaco, tiene efectos positivos en la reducción de recaídas, la progresión de la discapacidad, y la mejora de la calidad de vida física y psicológica de los pacientes.
Por: Katherine Ardila
Un estudio prospectivo multicéntrico ha revelado hallazgos sobre el tratamiento con alemtuzumab, un anticuerpo monoclonal anti-CD52, en pacientes con esclerosis múltiple (EM) remitente-recurrente.
Este estudio observacional de tres años, que involucró a 165 pacientes adultos con una edad promedio de 38,6 años, mostró mejoras significativas y sostenidas en diversos aspectos de la calidad de vida, con reducciones notables en las recaídas clínicas, la progresión de la discapacidad, y mejoras en los dominios físicos y psicológicos del bienestar de los pacientes.
Diseño del estudio
El estudio se realizó entre 2016 y 2018 y fue diseñado para evaluar los efectos a largo plazo del alemtuzumab en la calidad de vida de los pacientes con EM remitente-recurrente.
Los participantes fueron seleccionados según las pautas de la práctica clínica, iniciando el tratamiento con alemtuzumab en un plazo máximo de ocho semanas antes de la inclusión en el estudio.
Los investigadores realizaron evaluaciones regulares cada seis meses durante tres años, monitoreando los parámetros de calidad de vida, la tasa de recaídas, la actividad en resonancia magnética (RM), y la progresión de la discapacidad mediante la Escala Expandida del Estado de Discapacidad (EDSS).
Los parámetros de calidad de vida fueron evaluados utilizando la Escala de Impacto de Esclerosis Múltiple de 29 Ítems (MSIS-29), un instrumento ampliamente utilizado que mide los efectos de la EM tanto en el dominio físico como en el psicológico.
Además, se realizaron mediciones adicionales de la fatiga, la depresión, la función cognitiva y la productividad laboral como objetivos secundarios.
Resultados
1. Reducción en la tasa anualizada de recaídas
El tratamiento con alemtuzumab resultó en una reducción impresionante del 83% en la tasa anualizada de recaídas, que descendió de 0,89 (con un intervalo de confianza del 95 % de 0,79-1,0) al inicio del tratamiento a 0,15 (IC del 95 %, 0,10-0,23) durante los tres años de seguimiento.
Esto implica que los pacientes experimentaron significativamente menos recaídas clínicas, lo que resalta la eficacia del tratamiento para controlar la enfermedad a largo plazo.
2. Mejoras en la calidad de vida
Las puntuaciones de la Escala de Impacto de Esclerosis Múltiple de 29 Ítems (MSIS-29) mostraron mejoras sustanciales en los dominios físicos y psicológicos.
En el dominio físico, las puntuaciones disminuyeron desde 7,2 puntos en el primer año hasta 5,6 puntos en el tercer año (p < 0,05). En el dominio psicológico, las puntuaciones aumentaron de 7,9 puntos en el primer año a 13,2 puntos en el tercer año (p < 0,05).
Estas mejoras indican una reducción del impacto negativo de la enfermedad en la funcionalidad física y la salud mental de los pacientes, lo que refleja una mejor calidad de vida.
3. Reducción en la fatiga y la depresión
El tratamiento también mostró una disminución significativa en las puntuaciones de las escalas de fatiga y depresión, dos síntomas comunes y debilitantes en los pacientes con EM.
Esto es relevante porque la fatiga y la depresión son factores que afectan profundamente la calidad de vida de los pacientes con EM, y su control puede mejorar considerablemente el bienestar general.
4. Libertad de progresión de la discapacidad y actividad radiológica
Al final del seguimiento de tres años, el 81,5% de los pacientes estaban libres de actividad radiológica, lo que indica que no hubo cambios evidentes en las imágenes de resonancia magnética que sugirieran daño cerebral activo.
Además, el 87% de los pacientes no experimentaron progresión de la discapacidad.
Limitaciones del estudio
A pesar de los resultados prometedores, los autores del estudio señalaron algunas limitaciones importantes que deben ser consideradas al interpretar los hallazgos. El estudio fue observacional, lo que significa que no incluyó un grupo de control comparativo, lo que limita la capacidad de realizar comparaciones directas con otros tratamientos.
Además, los pacientes que participaron en el estudio tenían niveles bajos de discapacidad al inicio del tratamiento, lo que podría haber influido en la magnitud de las mejoras observadas, especialmente en el dominio físico de la calidad de vida. Los investigadores sugirieron que los resultados podrían ser más pronunciados en pacientes con formas más graves de la enfermedad.
Recomendaciones
El alemtuzumab ha demostrado ser un tratamiento eficaz para la esclerosis múltiple remitente-recurrente, con efectos positivos en la reducción de recaídas, la progresión de la discapacidad, y la mejora de la calidad de vida física y psicológica de los pacientes.
Los resultados del estudio indican que el tratamiento produce mejoras tempranas y sostenibles en la percepción de los pacientes sobre su bienestar, lo que podría hacer de alemtuzumab una opción valiosa en la práctica clínica para el manejo de esta enfermedad neurológica crónica.
Los investigadores concluyeron que los efectos positivos observados, especialmente en los pacientes con menos discapacidad inicial, refuerzan la idea de que el tratamiento temprano con alemtuzumab puede ser crucial para obtener los mejores resultados.
Sin embargo, se necesita más investigación, incluyendo ensayos controlados aleatorizados, para validar estos hallazgos y confirmar la eficacia del tratamiento en una población más amplia y diversa.
Fuente consultada aquí.