Cada día, más de un millón de relaciones sexuales terminan con uno de los implicados infectando a otro con gonorrea, sífilis, clamidia o tricomoniasis.
Cada día, más de un millón de relaciones sexuales terminan con uno de los implicados infectando a otro con epidemia de infecciones sexuales como gonorrea, sífilis, clamidia o tricomoniasis. Son las cuatro principales enfermedades de transmisión sexual tratables y curables.
Forman una epidemia de infecciones sexuales “oculta, silenciosa y peligrosa”, en palabras de Melanie Taylor, principal autora del estudio que acaba de publicar la Organización Mundial de la Salud (OMS). Más allá del dato —370 millones de nuevas infecciones anuales— el documento muestra algo “preocupante”: la tendencia se mantiene, no existen la concienciación ni los medios para detener unos contagios que se podrían frenar con un simple condón.
El resultado es que una de cada 25 personas entre 15 y 49 años en el mundo porta alguna de estas epidemia de infecciones sexuales, en muchas ocasiones, sin ser consciente de ello.
Las cifras que se publican ahora provienen de 2016 y son prácticamente idénticas a las anteriores, de 2012: 156 millones de nuevos casos de tricomoniasis, 127 de clamidia, 87 de gonorrea y 6,3 de sífilis. El estudio no incluye las infecciones de transmisión sexual (ITS) víricas incurables: hepatitis B, virus del herpes simple (HSV), VIH y virus del papiloma humano (VPH).
Según Taylor, la carga global de esta epidemia de infecciones sexuales es “increíblemente alta”.
Las cuatro principales
Tricomoniasis. A diferencia de las otras tres, que son bacterianas, esta está causada por un parásito, llamado Trichomonas vaginalis. Es la ITS tratable más común del mundo y sus síntomas pueden variar. Según el Centro de para el Control y Prevención de Enfermedades de EE UU, la mayoría de los que tienen el parásito no saben que están infectados.
Clamidia. La causa la Chlamydia trachomatis. En las mujeres se aloja en el cuello del útero y en los hombres en la uretra. En ambos sexos puede contraerse también en el recto y la garganta. Normalmente no presenta síntomas y las mujeres pueden transmitirlo a los hijos durante el parto.
Gonorrea. Junto con la clamidia, es la principal causante de enfermedad inflamatoria de la pelvis, desenlace adverso del embarazo e infertilidad. La bacteria que la causa está adquiriendo resistencias a los medicamentos que la curan y se puede convertir en un gran problema de salud pública.
Sífilis. Se la llama la gran imitadora por su diversidad de síntomas posibles, que a menudo se parecen al de otras enfermedades. En sus últimas etapas, puede causar enfermedades cardiovasculares y neurológicas graves, incluso la muerte.
La transmisión de estas tres últimas enfermedades durante el embarazo puede acarrear graves consecuencias para los bebés, como muerte fetal, muerte neonatal, bajo peso y prematuridad, sepsis, ceguera, neumonía y deformidades congénitas.