En 1994, se detectó una gran masa en el útero de la Dra. Flores. Aunque inicialmente existía la preocupación de un posible cáncer de ovario, esta posibilidad fue descartada.
Por: Mariana Mestizo Hernández
En Puerto Rico, se estima que aproximadamente 75,000 mujeres padecen endometriosis, lo que representa el 7.5% de la población femenina. Esta cifra se fundamenta en estudios de la Ponce Health Sciences University, liderados por la Dra. Idhaliz Flores, principal investigadora de la enfermedad en la isla y profesora en dicha institución.
Desde su adolescencia, la Dra. Flores mostró un gran interés por las ciencias, aunque nunca imaginó que su propio diagnóstico la llevaría a dedicar su carrera a la investigación y el combate de la endometriosis. Aunque podía encontrar alivio temporal, su mayor preocupación era la dificultad para obtener un diagnóstico preciso que explicara el intenso dolor en la zona pélvica.
"Era un dolor incapacitante durante el periodo menstrual, que como no eran crónicos, yo los catalogaba normal. Sin embargo, con el tiempo se complicó cuando me tuvieron que hospitalizar en dos ocasiones con un dolor severo y agudo de origen desconocido y aún viviendo en los Estados Unidos no me pudieron dar un diagnóstico", narró la Dra. Flores anteriormente para la Revista Medicina y Salud Pública.
"El no saber de dónde provenía el dolor me causaba mucho estrés, tensión y miedos de lo que pudiera ser", añadió.
Los retos de la infertilidad y el impacto emocionalEn 1994, se detectó una gran masa en el útero de la Dra. Flores. Aunque inicialmente existía la preocupación de un posible cáncer de ovario, esta posibilidad fue descartada, brindándole cierta tranquilidad. Fue entonces cuando recibió el diagnóstico de endometriosis, una condición que, mes tras mes, le estaba causando infertilidad.
"Fueron ocho años de angustia constante debido a la infertilidad. Fue un impacto muy fuerte a nivel emocional, especialmente en una sociedad donde se espera que, al casarse, una mujer tenga hijos de inmediato. Esa expectativa social, familiar y personal afectó profundamente mi estado emocional, tal como sucede con muchas otras mujeres que comparten su testimonio conmigo", relató.
Procedimientos médicos y la lucha contra el dolor
En su búsqueda de alivio para el dolor pélvico, la investigadora, oriunda de Coamo, se sometió a una laparotomía y tres laparoscopias.
"También recurrí a numerosos tratamientos para la endometriosis, incluyendo pastillas anticonceptivas y una variedad de medicamentos, además de terapias para la infertilidad. Me sometieron a la extracción de un endometrioma, un quiste originado en el revestimiento del útero y los ovarios, y enfrenté la realidad de haber perdido un ovario y una trompa de falopio. En ese momento, mi fertilidad ya estaba seriamente comprometida", relató.
Seis años después, logró cumplir su sueño de ser madre. Gracias a técnicas de reproducción asistida, logró concebir una niña.
De paciente a investigadora
El diagnóstico de endometriosis llevó a la Dra. Flores a convertir sus laboratorios en un espacio de investigación dedicado a la enfermedad. En 2007, motivada por su propia experiencia, inició los primeros estudios en Puerto Rico para comprender la epidemiología de la condición y los síntomas que más afectaban a las mujeres puertorriqueñas.
"Había muy poca información sobre la endometriosis y se necesitaba más investigación en el área biomédica. Me di cuenta de que tenía las herramientas y las técnicas de laboratorio necesarias para identificar la causa de los síntomas y comprender mejor la enfermedad. Fue entonces cuando decidí solicitar una subvención para dar inicio a los estudios", explicó. Su interés en la endometriosis también estaba marcado por un historial familiar de la condición.
Su aporte en la investigación sobre la endometriosis en Puerto Rico
Uno de los principales desafíos en el manejo de la endometriosis es la dependencia de terapias hormonales, que, si bien constituyen el estándar actual, no son efectivas para todas las pacientes y pueden generar efectos secundarios significativos.
Ante esta limitación, la Dra. Flores y su equipo han dirigido sus esfuerzos hacia la búsqueda de alternativas no hormonales, empleando modelos animales y colaboraciones interdisciplinarias.
"Utilizando un modelo de rata y en colaboración con un grupo de fisiólogas y neurocientíficas, hemos estado investigando una línea enfocada en el manejo del estrés desde diferentes perspectivas, ya sea desde un enfoque biopsicosocial o a través de estrategias farmacológicas", explicó.
"Farmacológicamente, descubrimos una molécula que regula el eje del cortisol, conocido como la ´hormona del estrés´, y hemos identificado su potencial como una diana terapéutica. Nuestros estudios indican que al atacar este eje, las lesiones de endometriosis disminuyen y, con ellas, el dolor", explicó la Dra. Flores.
Además, señaló que su equipo está trabajando en la comercialización de este posible tratamiento a través de una startup surgida en el Ponce Research Institute.
Retos y futuro de la investigación
A pesar de los avances, la investigación sobre la endometriosis enfrenta desafíos significativos, especialmente en la obtención de financiamiento. La Dra. Flores advirtió que los recursos disponibles no son proporcionales a la prevalencia de la enfermedad.
"El mayor desafío que enfrentamos actualmente es la falta de fondos para la investigación. No solo son insuficientes en comparación con la magnitud de la enfermedad, sino que también hemos encontrado barreras específicas dentro del ámbito de la salud femenina", señaló.
No obstante, se mantiene optimista sobre el futuro: "Esperamos que los estudios que estamos desarrollando a través de nuestra startup, Sur 180 Therapeutics, nos lleven a identificar moléculas capaces de tratar la endometriosis sin afectar el equilibrio hormonal", manifestó.
El papel de la educación y la legislación en la lucha contra la endometriosis
La Dra. Flores enfatizó la importancia de la educación como un pilar fundamental dentro del Proyecto de Ley PEDEL S1204, actualmente en discusión en el Senado de Puerto Rico.
"La educación es tan importante que es uno de los pilares de este nuevo proyecto de ley, el PEDEL S1204, que se está discutiendo en el Senado y que esperamos sea aprobado tanto en el Senado como en la Cámara de Representantes. Este proyecto busca garantizar educación, acceso a medicamentos y protección laboral para las pacientes, derechos que se merecen y que realmente les ayudarán a recuperar su calidad de vida y su salud de la manera más rápida", expresó.
"Soy investigadora de salud de la mujer y de endometriosis por los pasados 20 años ¿cierto? viene a consecuencia de mi propio diagnóstico y de yo tener que lidiar con esta compleja condición la cual me causó en su momento grandes dolores, severos incapacitantes dolores e inestabilidad y eso me ha motivado a preguntarme no por qué me dio la endometriosis sino para qué me dio la endometriosis y ha sido el motor que ha impulsado la creación de este network, porque es un grupo de trabajo hermoso que he podido consolidar aquí en el Ponce Research Institute", concluyó.