Educadora destaca la importancia de la educación sexual a adolescentes sin prejuicios y fundamentada en evidencia, enfocándose en la prevención del cáncer y el uso de preservativos.
Por: Laura Guio
El VPH es un grupo de 200 virus. Aunque generalmente no causa problemas, algunas cepas de alto riesgo pueden provocar verrugas genitales o cáncer.
Por lo mismo, en una entrevista exclusiva de la revista Medicina y Salud Pública, Yahira Reyes, educadora en salud sexual y directora de la página Mi Sexóloga PR, explica cómo padres, educadores y profesionales de la salud deben colaborar para crear espacios seguros de aprendizaje, así como el rol crucial de la vacunación contra el VPH en la prevención de este virus.
La Dra. Reyes explica que el VPH (Virus del Papiloma Humano) es una de las infecciones de transmisión sexual más comunes a nivel mundial.
"La mayoría de las personas que están sexualmente activas van a contraerlo en algún momento de sus vidas. Así que hablar de este tema durante la adolescencia es crucial, porque esto reduce la incidencia de infecciones y posibles complicaciones, como el cáncer de cuello uterino".
La educadora añade que el VPH puede no presentar síntomas inmediatos, lo que hace aún más necesario el enfoque preventivo y educativo, especialmente cuando se trata de adolescentes que recién comienzan a explorar su vida sexual.
Estrategias efectivas para educación sexual en adolescentes
Una de las estrategias más importantes y más efectivas para educar a los adolescentes según Reyes es brindar información clara y basada en evidencia.
"Cuando hablamos de una información clara, hablamos de un lenguaje sencillo que se pueda entender según las etapas del desarrollo del adolescente. Además, es fundamental que esta información se transmita sin sesgo ni prejuicio", afirma.
En este sentido, tanto los educadores como los padres deben estar preparados para ofrecer respuestas sinceras y científicamente correctas, abordando temas delicados como el VPH, el uso de preservativos, métodos de planificación y la prevención de enfermedades de transmisión sexual.
El uso de preservativos reduce el riesgo más no lo elimina
Aunque el preservativo no elimina por completo el riesgo de transmisión del VPH, Reyes señala que sigue siendo un método crucial para la prevención.
"El preservativo reduce significativamente la transmisión del VPH porque cubre las áreas que están directamente en contacto con los fluidos que pueden contener el virus", explica.
De igual forma, también enfatiza la importancia de enseñar a los adolescentes cómo usar correctamente los preservativos. Algunas de las recomendaciones que se deben tener en cuenta son las siguientes:
Para usar un preservativo correctamente, primero debe verificarse que esté dentro de su fecha de caducidad y que el empaque no esté dañado.
Luego, se debe abrir con cuidado y asegurarse de que esté orientado correctamente, con la parte externa hacia afuera. Se coloca sobre el pene erecto, dejando espacio en la punta para el semen, y se desenrolla hasta la base.
Durante la relación sexual, es importante asegurarse de que no se deslice ni se rompa. Después, se retira con cuidado, sujetándolo por la base, y se desecha en la basura, nunca por el inodoro. Finalmente, se debe usar un preservativo nuevo en cada acto sexual.
La importancia de la vacunación contra el VPH
La vacunación contra el VPH es otro aspecto clave en la educación sexual, según la experta.
"La vacunación es una estrategia súper importante porque, aunque contamos con 100 variantes del VPH, previene ciertos tipos asociados con complicaciones graves, como el cáncer. Integrar la vacunación en la educación sexual va a ayudar a derribar mitos y abrir más espacios para hablar del tema, en las escuelas, comunidades y hogares", afirma Reyes.
Además, destaca que la vacunación puede ser un punto de partida para fomentar la conversación entre padres e hijos sobre la sexualidad y la prevención de enfermedades.
El papel de los padres en la educación sexual de los adolescentes
Los padres juegan un rol importante en la formación de los valores y las actitudes hacia la sexualidad. "Si en la familia somos un obstáculo para la información, estamos violentando los derechos humanos y sexuales de los adolescentes", advierte.
La educadora insiste en que los padres deben crear un ambiente seguro donde los adolescentes puedan expresar sus dudas sin temor a ser juzgados.
"Es importante reconocer la etapa en la que está el adolescente y crear espacios en donde podamos escuchar activamente sus inquietudes. Esto va de la mano con brindarles información científica y basada en evidencia que pueda disipar mitos", añade.
De igual manera, según la especialista las redes sociales son una de las herramientas más necesarias para llevar a cabo campañas en línea.
La presencia en plataformas digitales es una forma eficaz de llegar a los jóvenes, de manera interactiva y accesible, para promover información precisa, quitar tabúes y apoyarlos en la toma de decisiones informadas sobre su salud sexual.