Hay muchos dentistas en casa con febrícula y malestar general.
Servicios combinados MSP
La consulta del dentista es “uno de los puntos de contagio más agresivos” y sin embargo el Gobierno no ha regulado su actividad durante esta crisis sanitaria, protestan los profesionales. Las franquicias, ajenas al riesgo, empujan a sus odontólogos y auxiliares a seguir trabajando para que no caiga la facturación, lo que multiplica la tasa de infectados en pleno estado de alarma y confinamiento.
Otros profesionales sanitarios como fisioterapeutas o nutricionistas han cerrado sus consultas y tratan de atender a sus pacientes de forma telemática, si bien eso se hace complicado, por no decir imposible, en muchos casos. El resultado: nula actividad y pérdidas enormes en un sector, el de la salud, integrado mayoritariamente por autónomos.