Se está investigando la combinación de Ixekizumab, un tratamiento aprobado para la psoriasis, con la tisepatida, un fármaco para la pérdida de peso, con el fin de mejorar los marcadores metabólicos.
Por: Mariana Mestizo Hernández
Actualmente, en Puerto Rico se adelantan diversas investigaciones sobre enfermedades de la piel, como la dermatitis atópica y la psoriasis. Estas iniciativas buscan ofrecer alternativas a pacientes que no han respondido adecuadamente a los tratamientos disponibles, incluidos los medicamentos biológicos.
Una de estas investigaciones está encabezada por la Dra. Eneida de la Torre, dermatóloga, "es un estudio donde estamos evaluando pacientes que hayan fallado cada uno de los tratamientos que ya están disponibles en el mercado, que son los biológicos. Pacientes que hayan fallado a esa terapia, pues estamos evaluando otras opciones terapéuticas que puedan funcionar para estos pacientes", señaló la investigadora principal.
La especialista mencionó que, si bien en la psoriasis existen más opciones terapéuticas, en la dermatitis atópica el abanico es limitado. En este contexto, su equipo evalúa tratamientos orales basados en inhibidores de JAK, una familia de medicamentos que no requiere aplicación inyectada y que ha mostrado resultados prometedores, especialmente en el control del prurito.
"Estos medicamentos, que son de administración oral, han demostrado ayudar significativamente en el picor de los pacientes. Sabemos que esta condición comienza con el picor, y al tratarlo de forma efectiva, también logramos reducir la inflamación y mejorar el estado general de la piel", señaló.
Evaluación de nuevas alternativas terapéuticasAdemás, la experta señaló que se están evaluando nuevas alternativas para pacientes cuyo tratamiento actual no resulta efectivo o ha perdido eficacia con el tiempo.
"Un paciente que esté en un tratamiento que no le esté funcionando, o que le funcionó por un tiempo y le dejó de funcionar, pues se están investigando otras opciones terapéuticas", indicó.
Respecto a los inhibidores de JAK, la dermatóloga enfatizó que su uso se originó en otras especialidades médicas. "Son medicamentos que realmente quienes primero los comenzaron a estudiar y a trabajar son los reumatólogos. Son medicamentos que ahora mismo ya tienen aprobación en otras condiciones de reumatología; en dermatología también ya tienen aprobación", explicó.
Añadió que actualmente se busca fortalecer la evidencia científica sobre su efectividad en pacientes con enfermedades dermatológicas, especialmente dermatitis atópica. Además, mencionó que, si bien ya están aprobados para su uso desde los 12 años, se están realizando estudios para evaluar su seguridad y eficacia en poblaciones pediátricas menores de esa edad.
Psoriasis y obesidad: un estudio conjunto
Asimismo, la dermatóloga lidera una investigación junto al psiquiatra William Julio, en la que se analiza el impacto bidireccional de la psoriasis en pacientes con obesidad. En Puerto Rico, advirtió, aún no se cuenta con estudios locales sólidos que permitan conocer con precisión la prevalencia de esta enfermedad.
"La psoriasis, lamentablemente, en Puerto Rico en general no tenemos estudios base de todas estas condiciones. Nos tenemos que dejar llevar por la data de Estados Unidos. Se sabe que alrededor de un 3 % de la población [la padece], pero en Puerto Rico se ha pensado que es mucho más", afirmó.
Psoriasis y síndrome metabólico
La especialista destacó que la psoriasis ha sido estudiada en relación con el síndrome metabólico, un conjunto de condiciones que aumenta el riesgo de hipertensión, colesterol alto, diabetes y obesidad en los pacientes con psoriasis.
"Cuando el cuerpo está descontrolado, la psoriasis también lo está. Un paciente con psoriasis debe ser evaluado no solo externamente, sino también internamente, con la supervisión de su médico primario para revisar su colesterol, presión y azúcar", explicó.
En los estudios actuales, se investiga la combinación de Ixekizumab, un tratamiento aprobado para la psoriasis, con la tisepatida, un fármaco para la pérdida de peso. Se busca que, al reducir el peso de los pacientes, se logren mejoras en los marcadores metabólicos como la presión, los niveles de azúcar y el colesterol. Además, el enfoque terapéutico incluye el fomento de un estilo de vida saludable, con ejercicio y asesoría nutricional.
"Sabemos que una vez el paciente empieza a bajar de peso, todos esos marcadores empiezan a mejorar: la presión se controla, la diabetes y el colesterol también. Si logramos que en estos pacientes con comorbilidades, como hipertensión, diabetes y colesterol alto, la inflamación disminuya y al mismo tiempo bajen de peso, entonces podemos reducir la dependencia de medicamentos para controlar esas condiciones", explicó.
Enfoque integral para mejorar la calidad de vida
Además, enfatizó que el enfoque terapéutico no solo aborda la psoriasis, sino que se extiende a la mejora integral del paciente. Los participantes en el estudio reciben asesoramiento nutricional y un plan de ejercicios personalizado, con un objetivo claro.
"El paciente tiene que hacer ejercicio, al menos 30 minutos, cinco veces a la semana. Se les motiva a mejorar su estilo de vida y su dieta, con el fin de que su calidad de vida mejore en general".
Impacto emocional y psicológico de la psoriasis
Este tipo de pacientes no solo enfrentan retos físicos, sino que también la psoriasis puede tener un impacto emocional y psicológico, ya que muchos se sienten acomplejados y excluidos socialmente.
"Un paciente de psoriasis que llega primero a la oficina es un paciente que está completamente estigmatizado, a pesar del calor en Puerto Rico, se cubren para que su condición no sea vista", comentó.
Además, explicó que la psoriasis se asocia con trastornos como la depresión y la ansiedad. El objetivo de los tratamientos es mejorar no solo la apariencia de la piel, sino también la salud general del paciente, ayudando a que se sientan más saludables, productivos y mejor integrados en la sociedad.