Primero, el secretario de Salud, Dr. Víctor Ramos Otero, aclaró que su participación en el caso de Anthonieshka Avilés Cabrera se limitó a una evaluación física general como pediatra, sin abordar aspectos psicológicos ni de capacidad procesal.
Por: Redacción MSP
El secretario del Departamento de Salud de Puerto Rico, el Dr. Víctor Ramos Otero, defendió este miércoles su participación en la evaluación de la menor Anthonieshka Avilés Cabrera, imputada por el asesinato de Gabriela Nicole Pratts Rosario, al enfatizar que su intervención se limitó estrictamente a un examen físico general como pediatra, sin incursionar en aspectos psicológicos o de capacidad procesal.
La aclaración surge en medio de críticas públicas y cuestionamientos surgidos durante la vista de procesabilidad celebrada el miércoles en el Tribunal de Aibonito, donde se determinó que Avilés Cabrera, quien al momento de los hechos tenía 17 años, pero ya tiene 18 es procesable para enfrentar cargos por el homicidio de su compañera de escuela, ocurrido en septiembre pasado.
"No fue coordinada por el Departamento de Justicia, pues era una evaluación física que le correspondía a la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA)", explicó la secretaria de Justicia, Lourdes Gómez, en un comunicado oficial emitido por el Departamento de Justicia. Gómez subrayó que la intervención de Ramos se debió a la "falta de disponibilidad de otro profesional con esa especialidad" en el momento, y reiteró que el examen se centró en la salud física de la imputada, sin involucrar análisis mentales.
En una entrevista con Radio Isla 1320 AM, el propio Ramos respondió a las críticas que han circulado en redes sociales y medios locales, argumentando la necesidad de actuar ante la urgencia del caso. "Alguien tenía que hacer el trabajo. Llamé a como cinco pediatras de la región y siempre está esa renuencia de que después me van a citar al tribunal. Yo soy el secretario de Salud, y es una agencia bajo mi sombrilla; establecimos un protocolo que requiere que un pediatra la viera", detalló.
Es importante destacar que la evaluación de la procesabilidad de Avilés Cabrera, es decir, su capacidad mental para ser juzgada no correspondió al Dr. Ramos ni a ningún pediatra. Esa responsabilidad recae en profesionales de la salud mental, específicamente psicólogos o psiquiatras forenses. Según el Departamento de Justicia, la valoración psicológica fue realizada por un psicólogo designado por ASSMCA, y no por el secretario de Salud. "La evaluación fue física, no mental", insistió Gómez, para desmentir rumores que han vinculado erróneamente la participación de Ramos con la determinación judicial de procesabilidad.
El caso de Avilés Cabrera ha captado atención nacional desde el incidente en que la menor presuntamente apuñaló fatalmente a Pratts Rosario durante una discusión. La imputada enfrenta cargos por asesinato en primer grado y podría ser juzgada como adulta, pendiente de la resolución final de la vista.
El Departamento de Salud ha enfatizado su compromiso con protocolos éticos y la separación clara de roles médicos y judiciales en casos sensibles como este.