El uso de esteroides anabolizantes en el culturismo y el deporte está vinculado a graves riesgos cardiovasculares, como el aumento del colesterol LDL, la inflamación vascular y enfermedades como la miocardiopatía dilatada.
Por: Jineth Rodríguez
El uso de esteroides anabolizantes sigue siendo una práctica común en el ámbito del culturismo y el deporte, impulsada por la búsqueda de una mayor masa muscular y un rendimiento físico superior.
Sin embargo, lo que muchos desconocen o minimizan son los riesgos cardiovasculares que estos compuestos pueden generar. Estos efectos devastadores sobre el sistema cardiovascular pueden poner en riesgo la vida de quienes consumen esteroides, incluso a edades tempranas.
Los efectos cardiovasculares de los esteroides
Los esteroides anabolizantes imitan la acción de la testosterona en el cuerpo, y uno de los efectos secundarios más graves de su uso es su impacto directo en el sistema cardiovascular.
De acuerdo con diversos estudios, como el realizado por el National Institute of Health (NIH), los esteroides pueden alterar negativamente el perfil lipídico, incrementando los niveles de colesterol LDL (malo) y reduciendo el colesterol HDL (bueno).
Esta desregulación en los niveles de colesterol favorece la formación de placas ateroscleróticas, que pueden obstruir las arterias y aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares graves, como ataques al corazón y accidentes cerebrovasculares.Además, los esteroides inducen una mayor inflamación en los vasos sanguíneos, lo que agrava aún más estos riesgos.
En este contexto, los estudios han demostrado que el uso prolongado de estos fármacos puede debilitar el corazón, aumentando la probabilidad de desarrollar condiciones como la miocardiopatía dilatada, una enfermedad que afecta el músculo cardíaco, dificultando su capacidad para bombear sangre de manera eficiente.
Esta es una de las principales razones por las que los médicos advierten contra el uso no supervisado de esteroides, ya que los efectos a largo plazo pueden ser devastadores.
El caso de Joey Farrell: Un ejemplo de las consecuencias cardiotóxicasUn caso emblemático de los peligros de los esteroides en la salud cardiovascular es el de Joey Farrell, un culturista profesional que sufrió un fallo cardíaco a los 30 años, directamente relacionado con el uso de esteroides. Farrel comenzó a consumir estos fármacos a los 20 años, y a pesar de los efectos adversos que ya empezaba a experimentar, continuó utilizando esteroides en su carrera deportiva.
En un análisis médico reciente, los resultados revelaron que sus niveles de troponina, un marcador de daño cardíaco, estaban peligrosamente elevados. Los médicos diagnosticaron miocardiopatía dilatada inducida por esteroides, una enfermedad que deteriora el músculo cardíaco y afecta la circulación sanguínea.
La falta de regulación y el uso incontrolado de esteroides
El uso de esteroides anabolizantes está estrictamente regulado en muchos países, y su distribución sin receta es ilegal. En Reino Unido, por ejemplo, se estima que unas 500,000 personas consumen esteroides, a pesar de las estrictas leyes que prohíben su distribución sin prescripción médica.
En muchos casos, el uso de estos fármacos se realiza sin la supervisión de profesionales de la salud, lo que aumenta significativamente los riesgos asociados. Además, la falta de directrices claras sobre cómo mitigar los efectos adversos del consumo de esteroides agrava aún más el problema.
Los culturistas a menudo recurren a la "ciencia de colegas" o "bro science", donde experimentan con diferentes combinaciones de esteroides sin el respaldo de investigaciones científicas sólidas.
Esto no solo pone en riesgo su salud cardiovascular, sino que también puede provocar efectos secundarios psicológicos graves, como depresión, ansiedad y trastornos de la conducta alimentaria.
La importancia crítica de la educación y la prevención
Los expertos en salud pública han advertido sobre la creciente preocupación por el uso de esteroides en el ámbito deportivo y de la estética. La falta de conocimiento sobre los riesgos cardiovasculares y las consecuencias a largo plazo del consumo de estos fármacos pone en peligro a una gran cantidad de personas, muchas de ellas jóvenes, que buscan mejorar su rendimiento físico sin entender completamente las repercusiones en su salud.
Según Jim McVeigh, especialista en abuso de sustancias, la educación y la prevención son esenciales para reducir los riesgos del uso de esteroides y fomentar hábitos saludables entre los deportistas y culturistas.
Es crucial que los consumidores de esteroides sean conscientes de los peligros que estos fármacos pueden causar, especialmente en su salud cardiovascular. En lugar de recurrir a métodos peligrosos para mejorar el rendimiento físico, deben optar por alternativas más seguras y sostenibles para alcanzar sus objetivos sin poner en peligro su vida.
Fuente de consulta: Aquí, aquí y aquí