Alrededor de 17 millones de niños son elegibles para las vacunas COVID-19.
La Administración de Drogas y Alimentos de los EE.UU. restringió el uso de este biológico debido a un posible riesgo de trombosis con síndrome de trombocitopenia.
Una investigación de los CDC concluyó que la dosis de refuerzo de las vacunas de Pfizer y Moderna pierde efectividad tras 4 meses, pero aun así protege de la hospitalización.