Conocida por ser el padecimiento que afectó al destacado científico Stephen Hawking, la ELA todavía no tiene cura que revierta los síntomas o que frene los primeros indicios. Esto podría cambiar gracias a un proceso que describe el rol de una proteína que falla en esta condición.
Reciente estudio descubrió que el hongo causante de la candidiasis logra traspasar una barrera protectora que evita la entrada de microorganismos dañinos al cerebro causando daños neurológicos en los afectados.
El foco científico se centra en pacientes pediátricos con necesidad de trasplante de médula ósea.