El lupus eritematoso sistémico es una enfermedad crónica en la que el sistema inmunitario del paciente ataca a diferentes órganos y tejidos.
El lupus eritematoso sistémico es una enfermedad crónica en la que el sistema inmunitario del paciente ataca a diferentes órganos y tejidos, puede afectar la piel, las articulaciones, los riñones, los pulmones, el sistema nervioso, etc. Esta enfermedad provoca daño e inflamación.
Al tratarse de una enfermedad autoinmune no tiene cura, sin embargo, se puede controlar con fármacos que pueden regular el sistema inmunitario y frenar la inflamación. Además, la irrupción reciente de nuevas terapias biológicas ha abierto nuevas vías de tratamiento que mejoran la calidad de vida de los pacientes.
En una entrevista en exclusiva para Medicina y Salud Pública el doctor Manuel Rojas, quien es investigador del Centro de estudio de enfermedades autoinmunes de la Universidad del Rosario, habló sobre el lupus eritematoso sistémico, la prevalencia y los últimos tratamientos que hay para esta afección.
El doctor Rojas comenta “las enfermedades autoinmunes son un grupo de enfermedades muy amplio que se caracteriza principalmente por que se pierde una ´tolerancia a lo propio` que quiere decir que el cuerpo se empieza a atacar a sí mismo” agrega.
El lupus eritematoso sistémico
Se considera una enfermedad autoinmune prototipo, ya que es una enfermedad que es categorizada como sistémica pues afecta cualquier órgano. Es una enfermedad que tiene una carga en la calidad de vida del paciente y el sistema de salud por lo que son enfermedades costosas y que requiere de muchos tratamientos para mejorar la calidad de vida del paciente.
Con esta terapia se demostró una reducción en la inflamación en los pacientes a los que se les administró la interleuquina II, también se evidenció menor actividad de la enfermedad.
Esta es una enfermedad crónica que no tiene cura, pero se puede controlar con los tratamientos donde se puede mejorar la calidad de vida y que puedan llevar una vida normal.