Esta bacteria es la causa principal de cáncer de estómago, uno de los tipos más comunes de cáncer.
Por: Estefanía Santos
Una capa de células que se parecen al revestimiento normal del estómago en la parte superior del cáncer de estómago puede dificultar la detección después de la extirpación por una infección de Helicobacter pylori. Ahora, investigadores de la Universidad de Hiroshima, Japón, han descubierto el origen de esta capa de células: es producida por el propio tejido canceroso.
H. pylori es un tipo de bacteria estomacal que, para sobrevivir, neutraliza el ácido. Esta bacteria es la causa principal de cáncer de estómago, uno de los tipos más comunes de cáncer. H. pylori causa inflamación al inyectar una sustancia similar a una toxina en las células de la mucosa que recubren el estómago. Esta destrucción y regeneración de las células puede llevar al desarrollo de cáncer de estómago.
En este estudio, publicado en la revista Journal of Gastroenterology, los investigadores han encontrado los orígenes de una extraña capa de células que estaba presente en sitios de cáncer estomacal después del tratamiento con H. pylori. Esta capa, llamada ELA (epitelio con atipia de bajo grado), se parecía a las células mucosas normales que recubren el estómago y actuaba como una 'máscara' para ocultar el cáncer de estómago. Hasta ahora, los investigadores no estaban seguros de dónde provenía esta capa.
"Fue muy interesante científicamente encontrar que ese cáncer se repite incluso después de erradicar las bacterias causales. La erradicación de H. pylori afecta la regeneración de la mucosa gástrica. Después de la erradicación hay muchas depresiones rojizas en el estómago, la mayoría de ellas no son cáncer. Es difícil identificar la mucosa de ELA de entre la mucosa regular",
explica el principal responsable del trabajo, Kazuaki Chayama.
El grupo de investigación realizó un estudio preliminar en 10 pacientes después de operaciones gástricas y buscó esta capa de células. El ADN de las células ELA se estudió intensamente y se encontró que era idéntico al de las células cancerosas del estómago. Se concluyó que el ELA proviene del propio tejido cancerígeno del estómago.
Estos hallazgos podrían significar que incluso después de deshacerse de H. pylori todavía existe un riesgo de cáncer estomacal para algunos pacientes. El cáncer de estómago puede ser difícil de detectar debido a su ubicación y al hecho de que la enfermedad puede progresar lentamente. Esto no se ve favorecido por el ELA que enmascara el cáncer después de la extirpación del factor causal.