Implantes orales metálicos estarían aumentando el riesgo de enfermedades, según estudios

Los implantes de titanio no son totalmente inertes y pueden liberar micropartículas metálicas a través de un proceso llamado bio-tribocorrosión.

Por: Katherine Ardila


Durante años, los implantes de titanio fueron considerados el estándar en odontología. Pero hoy, un movimiento global de científicos y odontólogos advierte: estos materiales podrían no ser tan inertes como se creía. 

La evidencia apunta a que la liberación de micropartículas metálicas puede desencadenar inflamación crónica y hasta favorecer enfermedades a distancia. La buena noticia es que existen alternativas cerámicas seguras y avaladas por las principales agencias regulatorias del mundo.

Perder una pieza dental es un problema de salud, no solo estético. A nivel global, la falta de acceso a implantes dentales es abrumadora: de 8.000 millones de personas, solo 34 millones reciben implantes al año. 

Las consecuencias van más allá de una masticación deficiente. La alteración del microbioma oral, un ecosistema de más de 700 especies de microorganismos, se vincula con un mayor riesgo de caries, enfermedad periodontal e incluso con trastornos sistémicos graves como neumonía y ciertos tipos de cáncer. 

Estudios recientes publicados en el Journal of Alzheimer’s Disease van más lejos: sugieren que el desequilibrio en la boca puede afectar órganos distantes como el cerebro y el intestino, e incluso comprometer funciones cognitivas.

El problema del titanio: La bio-tribocorrosión

El titanio no es eterno. En la boca, está expuesto a un ambiente húmedo, ácido y bajo constante fuerza masticatoria. 

Esto desencadena un proceso llamado bio-tribocorrosión: una combinación de desgaste mecánico y corrosión electroquímica que libera lentamente iones y micropartículas metálicas en los tejidos.

Estas partículas no se quedan quietas. Investigaciones lideradas por el Dr. Daniel Olmedo en Argentina demostraron que pueden viajar por el organismo, detectándose en órganos con alta actividad inmunológica como el hígado, el bazo, los pulmones e, impactantemente, incluso en el cerebro. 

Allí, pueden inducir estrés oxidativo e inflamación crónica, creando un terreno fértil para diversas patologías.

Un hallazgo europeo encabezado por el Dr. Johann Lechner añade más preocupación: el hueso alrededor de un implante de titanio puede sobreexpresar hasta 30 veces la quimiocina RANTES, un mediador inflamatorio vinculado a la progresión del cáncer de mama y ovario. 

Esto no prueba que causen cáncer, pero sí indica que podrían estar alimentando microambientes inflamatorios propicios para su desarrollo en personas predispuestas.

Zirconia: La revolución cerámica en odontología

Frente a esto, la zirconia estabilizada con itria (Y-TZP) se plantea como la alternativa más sólida. Este material cerámico de alta resistencia es bioinerte: no se corroe, no libera partículas y no interfiere en la bioelectricidad natural del cuerpo. 

Además, su superficie lisa reduce significativamente la adhesión bacteriana comparada con el titanio.

Un estudio italiano dirigido por Antonio Scarano lo comprobó: los discos de zirconia mostraron un 12.1% de superficie cubierta por bacterias, frente a un 19.3% del titanio. Al principio, su uso se reservaba para pacientes alérgicos a los metales. Hoy, la evidencia sobre los riesgos del titanio ha ampliado su indicación. 

Es una transición que muchos comparan con el abandono histórico de las amalgamas de mercurio.

¿Qué dicen los expertos?

Los profesionales han sido contundentes. Para el Dr. Adrián Di Sanzo, especialista en medicina regenerativa, “sería éticamente incoherente que un profesional informado siga colocando implantes metálicos cuando ya existen alternativas cerámicas, científicamente avaladas”.

El Dr. Juan Pablo Gramajo, referente en odontología neurofocal, explica que los metales en la boca pueden actuar como "campos interferentes", alterando la comunicación del sistema nervioso autónomo.

“La boca no puede desvincularse del resto del cuerpo. Cada implante metálico puede convertirse en un bloqueo que impide sanar al organismo”.

El Dr. Enrique Reinprecht, pionero en la técnica, ve un cambio para estos implantes:

“Estamos viviendo un cambio cultural en la odontología. La implantología cerámica no es solo una técnica: es un paso hacia una odontología más respetuosa con la biología humana”.

Buenos Aires será sede de la primera Ceramic Implant Summit en octubre, reuniendo a más de 20 expertos internacionales. La odontología avanza hacia un modelo que repara sonrisas, pero también prioriza la salud integral. 

La recomendación final es simple: infórmese, consulte con profesionales actualizados y recuerde que su boca es una puerta de entrada al bienestar de todo su cuerpo.





Lo Último
“Ser paciente fue una experiencia que me hizo mucho más sensible ante el dolor de las personas”
Septiembre 14, 2025

Verrugas por VPH y herpes genital: ¿Por qué no son lo mismo y cómo diferenciarlas?
Septiembre 13, 2025

Tecnología ocular regresa capacidad de comunicación en paciente con atrofia muscular
Septiembre 13, 2025

Con éxito total culminó campaña educativa por el Día Mundial de la Dermatitis Atópica en Bayamón
Septiembre 13, 2025

Suspender anticoagulantes en fibrilación atrial eleva el riesgo de eventos tromboembólicos: Experto
Septiembre 13, 2025