Dentro de las novedades en infectología, se presume de un medicamento inyectable de uso mensual, que inhabilitaría el virus y evitaría la baja en defensas de los pacientes.
Por: María Camila Sánchez
En la actualidad, el resurgimiento de enfermedades como el sarampión o la tosferina, ha llamado la atención de científicos de todo el mundo dado que eran condiciones que hasta hace poco se consideraban como erradicadas y que tienen un riesgo potencial de de generar brotes, pero también se ha hablado mucho de la resistencia a los antibióticos por su el uso indiscriminado de los mismos.
Estos fueron algunos de los temas centrales que se abordaron durante la Convención Anual de la Sociedad de Enfermedades Infecciosas de Puerto Rico, en la que, en una conversación exclusiva que sostuvo la Revista Medicina y Salud Pública con el infectólogo Dr. Humberto Guiot, el especialista señaló que durante el seguimiento de algunas enfermedades infecciosas, como el COVID o la Influenza, a muchas personas se les administran antibióticos que no siempre son efectivos para la infección que quieren atacar.
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"Hay médicos que prescriben, y hay condiciones en las cuales se puede presentar una condición viral concurrentemente con una enfermedad bacteriana, pero por lo general cuando el paciente tiene una enfermedad por virus, el uso de antibióticos debe evitarse", aseveró.
"El uso indiscriminado de antibióticos ha llevado al desarrollo de resistencia, afortunadamente hay unos antibióticos nuevos que están surgiendo, ya tenemos alguno de ellos disponible para cuando los pacientes tengan este tipo de infección con bacterias resistentes".
Brotes de enfermedades erradicadas
En cuanto al resurgimiento de algunas enfermedades infecciosas ya erradicadas, el Dr. Guiot señala que esto se debe a "una disminución en la captación de vacunas en las poblaciones, que ha hecho que estas condiciones que son altamente prevenibles con las vacunas estén nuevamente en aumento".
Pero también señala que el calentamiento global aumenta los casos de determinadas condiciones, de hecho, una de las conferencias dictadas durante la convención relacionaba el aumento de la temperatura de las aguas, con el riesgo potencial de que algunos cuerpos acuáticos estén infectados con virus como el de la cólera.
"Puede también causar el aumento de enfermedades que se transmiten por mosquitos, como dengue, y otras condiciones que se transmiten por el agua como leptospira, que es la enfermedad que se asocia con la orina de ratón, y que en cuadros severos y que no se atienden a tiempo, puede ser mortal".
Aumento en los casos de COVID-19 en Puerto Rico
Otro asunto que ha llamado la atención de los especialistas, es el alarmante porcentaje de positividad (42%) que alcanzó Puerto Rico en casos de COVID-19. Las autoridades sanitarias aseguraron que ese es, hasta ahora, el repunte más alto desde el inicio de la pandemia.
"Habíamos visto, en los últimos meses, un aumento en la comunidad y varios casos en el hospital. Pero ahora, estamos percibiendo que los pacientes de hospital están en aumento", señaló el especialista.
Y con esta elevada tasa de contagios, también han aumentado los casos graves de COVID-19 que requieren hospitalización, así como la muerte de algunos pacientes. Este nuevo rebrote de la enfermedad está afectando en mayor medida tanto a niños, como a la población geriátrica con complicaciones cardiovasculares y respiratorias.
¿Posible remisión para pacientes con VIH/SIDA?
Por otro lado, uno de los avances más prometedores discutidos en el evento, es la introducción de nuevos medicamentos para el tratamiento del VIH que permitirían que estos pacientes lleguen a un estado de inactividad del virus.
"A veces, con un solo medicamento una vez al día, el paciente logra estar muy estable. Antes se consideraba que tener VIH podía representar una sentencia de muerte, pero ya eso no es así. Hoy en día, el VIH/SIDA se considera una condición crónica, como tener presión alta o diabetes".
Múltiples han sido los productos que se han ido introduciendo en la gama de alternativas para esta condición, y la que más llama la atención es un fármaco inyectable que puede administrarse cada mes o cada cierto tiempo, pero no es un fármaco de ingesta diaria.
"Lo próximo que viene, son los nuevos tratamientos que logran que el virus se mantenga inactivo y no cause la disminución en las defensas, que es lo que lleva a los pacientes a tener complicaciones".