La encefalopatía de Wernicke, más allá de afectar comúnmente a personas que abusan del alcohol, puede ser mortal en pacientes con deficiencia de tiamina, a juzgar por un caso clínico registrado en la sala de emergencia del Manatí Medical Center.
La encefalopatía de Wernicke es una enfermedad neurológica que más allá de afectar comúnmente a personas que abusan del alcohol, puede ser mortal en pacientes con deficiencia de tiamina, a juzgar por un caso clínico registrado en la sala de emergencia del Manatí Medical Center.
La enfermedad ataca al cerebro –tálamo y el hipotálamo- asociada a la falta de vitamina B –específicamente B1 o Tiamina-, deficiencia que se registra en la mayoría de las personas que abusan del alcohol. Además, puede desarrollarse por la malabsorción, a causa de una enfermedad crónica o después de una cirugía bariátrica.
La encefalopatía de Wernicke está también relacionada al síndrome o psicosis de Korsakoff, que aparece a medida que disminuyen los síntomas de la enfermedad de Wernicke, y causa daño permanente a las zonas del cerebro asociadas a la memoria.
Lo síntomas que caracterizan a la enfermedad son confusión y pérdida de la actividad mental que podrían inducir una coma o muerte, pérdida de coordinación muscular o lo que se conocer como ataxia, movimientos oculares anormales (oftalmoplegía), pérdida de memoria, la confabulación o el inventar historias, alucinaciones, entre otras.
Fue Alberto García Orta, médico residente del Manatí Medical Center, quien investigó el caso junto Giancarlo C. Gierbolini, neurólogo y el doctor Eric Figueroa, ambos del Departamento de Medicina de Familia del Manatí Medical Center.