Por su similitud a otras condiciones, en ocasiones los oftalmólogos podrían no diagnostican correctamente esta enfermedad que, a nivel mundial se desconoce su prevalencia
La patología de telangiectasia macular tipo 2 suele confundirse mayormente con un edema macular que, al no ser tratado adecuadamente, puede causar complicaciones y pérdida de la visión a un paciente.
Por su similitud a otras condiciones, en ocasiones los oftalmólogos podrían no diagnostican correctamente esta enfermedad que, a nivel mundial se desconoce su prevalencia. No obstante, el doctor Lihteh Wu aseguró a MSP que podría ser más común de lo que se piensa.
“Aunque parezca que tenga un edema macular, no lo es, pero sí tiene apariencia, entonces es como una enfermedad simuladora”, indicó durante el 50 aniversario del congreso anual de la Sociedad Puertorriqueña de Oftalmología. Durante su presentación, mostró a los colegas imágenes de lo que realmente es y de los procesos a establecerse para poder llegar al diagnóstico correcto.
“No es un edema, sino una enfermedad causada por daños en las células Muller y vamos a proponer otros tipos de terapias. -Para llegar al diagnóstico- simplemente es tener buena visualización, examinar bien el paciente de manera clínica y confirmarlos con un CT. No es sorpresa que los tratamientos que se les da no funciona, y pueden empeorar su estado”, continuó.
Uno de los síntomas puede ser cuando el paciente comienza a notar cambios sutiles en la visión que, por ejemplo, no pueda leer bien. Wu mencionó que debemos ser meticulosos porque el detalle de la oftalmología es que cualquier condición causa pérdida de visión.
“El tratamiento no existe, solamente se queda bajo observación, pues hay un 20% que puede desarrollar una complicación que llamamos membrana neovascular coroidea y en esos casos sí amerita tratamientos con ciertas drogas. Antes de darle nombre y apellido a cualquier patología -los médicos- piensen en esa enfermedad, y queremos causar awareness de que existe la enfermedad”, sostuvo.
Las condiciones con las que los especialistas confunden son: degeneración relacionada a la edad y retinopatía diabética.