El Dr. Héctor Martínez asegura que continúa siendo una problemática de salud pública en Puerto Rico.
La implementación de protocolos para atender infartos agudos a nivel intrahospitalarios constituye uno de los principales énfasis de los cardiólogos y especialistas intervencionales en la isla.
Según el cardiólogo intervencional, Dr. Héctor Martínez, director de la Sección de Cardiología del Mayagüez Medical Center (MMC), el infarto al miocardio continúa viéndose entra la población más envejeciente y representa un desafío adicional a la salud pública del País por la alza de diagnósticos de diabetes y síndrome metabólico en la isla.
Por tal razón, los hospitales que no cuentan con Laboratorios de Cateterismos deben promover un protocolo que salvaguarde la vida de estos pacientes en lo que son atendidos por un especialista en cardiología.
Las expresiones del Dr. Martínez se dan en el marco del inicio del mes de la Prevención y Manejo de las Enfermedades Cardiovasculares.
El protocolo que el galeno describió como el ideal es aquel que se activa una vez un paciente sostiene que tiene dolor de pecho, se le realiza un electrocardiograma (EKG) en menos de 10 minutos y en no más de 90 minutos está siendo revascularizado de tratarse de un infarto agudo.
“En esta región (oeste) tenemos una alta incidencia de diabetes, enfermedad de lípidos, arteriosclerosis, son obesos y de mucha gente con estilos de vida no muy saludables. Tampoco estos pacientes cuentan con un acceso directo a los especialistas en cardiología debido a la falta de educación", aseguró en primer lugar.
“Lamentablemente estos pacientes están llegando muy tarde. En Estados Unidos un paciente siente un síntoma y acude al hospital mientras que aquí los puertorriqueños consultamos al vecino y eso es lo que no queremos. Tenemos que continuar la campaña de educación para estos pacientes sabiendo que en área Oeste nos tienen a nosotros (Mayagüez Medical Center) como hospital cardiovascular”, declaró.
De otra parte, sostuvo que hoy día existe la tecnología necesaria para tratar los riesgos cardiovasculares y enfermedades coronarias, enfatizando que las mallas colocadas luego de un evento de infarto al corazón son seguras y que las posibilidades de otro evento cardíaco a largo plazo no estarán relacionadas al ‘stent’.
“Es una especie de metal de platino, cromo o cobalto con un riesgo de que se tapen de 1%. Son bien seguras. Todo paciente que ha tenido un evento, tiene un evento de 10% de presentar un evento en los próximos 10 años”, repasó.
Asimismo, mencionó que pese a que los infartos al miocardio ocurren más en varones, en las mujeres sigue siendo difícil identificar la sintomatología asociada a este por presentarse de forma más “sutil” que no necesariamente pudiera ser dolor de pecho.
“A veces se confunden con reflujo, síntomas gástricos y otros escenarios y no sospechan que se trata de un infarto”, agregó.
El MMC cuenta con un grupo de 12 especialistas en cardiología, que incluye seis cardiólogos clínicos, tres cardiólogos intervencionales y tres electrofisiólogos. También ofrece servicios de cateterismos y angioplastias.