El daño de los nervios y la mala circulación son la principal razón para las complicaciones de salud entre las que las personas con problemas de pie diabético. Es la mayor causante de hospitalizaciones y de la mayor preocupación de los médicos especializados en esta enfermedad.
“Las complicaciones vasculares de la diabetes mellitus representan la principal causa de morbi-mortalidad entre la población diabética y dan lugar a un importante número de secuelas invalidantes como son la ceguera, la insuficiencia renal crónica o la amputación de la extremidad inferior, lo que provoca un marcado deterioro de la calidad de vida de los pacientes y un elevado costo económico y social”, explicó Lourdes Kutbi, Cirujana Ortopeda Presidenta de la Sociedad para la Prevención de Enfermedades Cardiovasculares.
La Doctora comentó que en Puerto Rico existen cerca de 550 mil pacientes con un diagnóstico de diabetes y se producen sobre 2,500 amputaciones al año, de las cuales el 70% se realiza en pacientes diabéticos.Dijo que el 85 % de las amputaciones no traumáticas de la extremidad inferior ocurren debido a problemas vasculares.
“A los cinco años de una amputación, el riesgo de mortalidad es aproximadamente de un 70%. Por eso es tan importante diagnosticar de manera precoz al paciente diabético con enfermedad vascular”, adujo la doctora Kutbi.
Según explicó, un procedimiento de amputación es precedido por problemas de circulación, tumores cancerosos, trauma o úlcera en el pie. Esa afección, la que sea, disminuye considerablemente la calidad de vida de los pacientes ya que tan solo un tercio de los que sufren la amputación de la extremidad vuelve a caminar usando una prótesis.
“Medicamente hablando, la evolución de los diabéticos con una amputación mayor es negativa, ya que el 30% fallece en el primer año desde la intervención y al cabo de cinco años un 50% sufren la amputación de la otra extremidad inferior”, comentó.
La mejor recomendación médica para que estas complicaciones no sucedan es la prevención adecuada de lesiones, así como el tratamiento médico adecuado. Este cuidado podría reducir la incidencia de amputación en un 50% y un 85%.
El costo aproximado en el período periamputación en Puerto Rico está entre los $30 y $60 mil dólares. En los 3 años post-amputación el costo promedio entre los $40 y $60 mil. El aumento en el precio se asocia al costo de terapias, prótesis, hospitalizaciones y complicaciones post procedimiento.
Un paciente diabético tiene niveles de azúcar elevados, que con el tiempo afectan cómo los nervios envían un mensaje. Esto quiere decir, que estos pacientes eventualmente desarrollan síntomas de adormecimiento y debilidad; cosquilleo y hormigueo; dolor punzante; y ardor y quemazón.
“Estos síntomas son más marcados en pacientes con un nivel de azúcar mayor de 150mg/dL y en pacientes con niveles de azúcar controlada, pero con un período de diagnóstico de más de ocho años”, manifestó la doctora Kutbi.
Como si fuera la poco, la aparición de otras enfermedades derivadas de sus mismas complicaciones, son la orden del día. Ese es el caso de la Neuropatía, Ulceras, Cambios de Piel, Disminución de la Circulación y Deformaciones, entre otros.
La Neuropatía es diagnosticada por la disminución de reflejos y de sensibilidad o la presencia de enfermedad arterial periférica, determinada por la medición de la presión transcutánea de oxígeno menor de 30 mmHg. Ambos, son los factores predictivos de principal importancia para el desarrollo de úlceras.
Igualmente se destaca la presencia de deformidades óseas, de alteraciones en el apoyo plantar y la historia previa de úlceras. De los factores de riesgo socio-económicos sólo se ha podido demostrar relación directa con la duración de la diabetes. Existen diferencias muy notables según sea la atención sanitaria de que disponga el paciente.
“La neuropatía es el causante de úlceras número uno. La presencia de ulceración multiplica el riesgo de amputación y complicación de la extremidad”, mencionó.
Con respecto a los cambios en la piel del paciente, hay que estar alerta a los siguientes cambios: disminución de vellos/ puede indicar la disminución de flujo sanguíneo; y las zonas de presión callosas las cuales de se consideran zonas pre-ulcerativas. El paciente debe estar en estado de alerta ante cualquier cambio en su piel.
Por otro lado, la disminución de circulación es la deficiencia en el flujo de sangre. Esto causa el 85% de las amputaciones y se debe al daño en el epitelio de las arterias, que causa que el flujo se vea obstruido para llegar a las piernas. La amputación es prevenible si se logra identificar a aquellos pacientes que presenten síntomas en etapa temprana de la enfermedad vascular.
Finalmente, las deformaciones, el cuidado preventivo del paciente y una mejor calidad de vida son piezas angulares en el tratamiento de la diabetes y sus consecuencias en la salud de sus pacientes. Puerto Rico es el país número uno en el diagnóstico de diabetes y se estima que el número de diabéticos continúe en ascenso debido a una dieta alta en calorías, grasas, azúcares y carbohidratos, acompañado de alto grado de sedentarismo.
Busque en este enlace el artículo completo.