Esofagitis eosinofílica: "Cada año sin diagnóstico aumenta el riesgo de desarrollar fibrosis y estrechez"

La condición puede manifestarse en diversas etapas de la vida, y existen predisposiciones genéticas que podrían llevar a una presentación más temprana.

Por: María Camila Sánchez


En el contexto del undécimo simposio anual de gastroenterología pediátrica, se destacó con importancia la esofagitis eosinofílica, una afección crónica en la que los eosinófilos, un tipo de células del sistema inmune, infiltran las paredes del esófago, provocando un estado inflamatorio persistente.

Al respecto, la Dra. Chiara Biaggi, gastroenteróloga pediátrica, compartió en exclusiva para la Revista Medicina y Salud Pública los aspectos más relevantes de esta enfermedad y los riesgos de un diagnóstico tardío.

Dilatación esofágica

"Se ha visto que cada año que pasa uno de estos niños sin diagnosticar aumenta el riesgo de desarrollar fibrosis y estrecheces. Inicialmente es una inflamación pero con el tiempo se convierte en cicatrización, la cual se cierra el lumen del esófago, es decir, ya está muy tarde y se debe hacer una dilatación a través de la endoscopía como uno se llama balloon dilation y se expande en el esófago", subrayó la experta.

¿Qué función tiene la dilatación esofágica?

La Dra. Biaggi señaló que esta dilatación esofágica no aborda directamente el problema fundamental de la condición. En lugar de eso, es comparable a resolver el obstáculo que está afectando el proceso de alimentación del paciente.

Vea el programa completo.

¿Cuál es el seguimiento de estos pacientes?

La gastroenteróloga mencionó que es necesario programar citas clínicas para estos pacientes en función de su estado de remisión de la condición, al menos una vez al año. Sin embargo, en su práctica, ella los revisa en la oficina cada cinco o seis meses. Además, resaltó la importancia de repetir la endoscopía según la gravedad de la enfermedad y cada vez que se realice un ajuste en el plan de tratamiento.

Pueden haber recaídas

Por otra parte, la especialista enfatizó que muchos pacientes logran llegar a la remisión, sin embargo, pueden haber algunas recaídas, donde destacó que, "Se rediscute la terapia en la que está el paciente y se toman decisiones. Compartido entre los niños y los padres para ver, hay diferentes opciones de tratamiento y se ajusta para tratar de lograr la remisión".

(Vea también: "El reflujo persistente que no mejora con antiácidos, se puede considerar una esofagitis eosinofílica")



Prevalencia en pacientes pediátricos

La experta explicó que la condición puede manifestarse en diversas etapas de la vida, y existen predisposiciones genéticas que podrían llevar a una presentación más temprana si ciertos genes están mutados. Esta afección puede manifestarse en pacientes de todas las edades en pediatría, incluso a partir de los 18 meses. 

Asimismo, es posible observarla en niños más pequeños, aunque esta situación es menos frecuente y podría indicar la influencia de condiciones genéticas que contribuyen a dicho problema médico. Además, la Dra. Biaggi aseguró que hay una mayor incidencia en varones.

Factores que pueden incidir en la esofagitis eosinofílica

La especialista en gastroenterología pediátrica resaltó que existen numerosos aspectos ambientales y la literatura ha tratado de realizar investigaciones para comprender los posibles factores de riesgo asociados a la enfermedad, como cuando el feto se encuentra en el útero materno. 

Esto ha involucrado la consideración de situaciones en las que la madre experimenta infecciones o fiebre durante el embarazo, así como la administración de cursos de antibióticos. Por otro lado, se ha evaluado la probabilidad de que la exposición del niño a múltiples tratamientos antibióticos pueda tener un impacto en la composición de la microbiota intestinal.

"Los pacientes que han recibido antibióticos en su niñez demasiadas veces, que han usado antiácidos mucho tiempo, y la ausencia de mascotas, de perritos en el hogar también es un factor de riesgo. Los perros son medios protectores porque mejoran nuestra microbiota. Hay que tener un perrito. Así que adopten perros".

(Le interesa: Cáncer gástrico, úlceras y otras complicaciones de la infección con helicobacter pylori)



Avances en el tratamiento

La experta compartió que en la actualidad disponen de un medicamento recién aprobado por la FDA para su uso en niños de 12 años en adelante. Asimismo, expresó la expectativa de que para el próximo año se obtenga la aprobación correspondiente para niños más jóvenes, a partir de los 11 años de edad.

"Definitivamente es la droga Dupixent y ha cambiado el curso de la enfermedad de muchos pacientes en Puerto Rico que no han estado respondiendo a terapias anteriores", concluyó.




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