La insulina se administra en la grasa subcutánea, evitando inyectarse a nivel intradérmico o muscular, ya que puede resultar más doloroso o alterar la velocidad de absorción.
Por: Redacción MSP
Una jeringa para insulina es un poco más delgada que las jeringas normales. Este tipo de jeringa, posee un tubo de plástico bastante fino y una aguja pequeña y fina para hacer la punción. Por lo general, la capacidad de las jeringas para insulina es de 1 ml o menos y se utilizan únicamente para administrar la insulina.
La insulina se administra en la grasa subcutánea, evitando inyectarse a nivel intradérmico o muscular, ya que puede resultar más doloroso o alterar la velocidad de absorción. Para asegurar una punción adecuada de insulina se debe tener en cuenta varios factores, entre ellos la elección de una aguja de longitud y grosor adecuados.
Cómo elegir correctamente el tamaño de la aguja:
Menor grosor de aguja conlleva menos dolor: El grosor de la aguja se mide en gauges y se expresa con una G. Cuanto mayor es el número de G, menor es el grosor. Las agujas que menos duelen son las que tienen 31G y 32G de grosor.
Adecuar la aguja de insulina al grosor de la piel: El grosor de piel en los adultos varía entre 2,0 y 2,5 mm, aunque puede oscilar entre 1,25 y 3,25 mm. Sin embargo, la piel de los niños es ligeramente menos gruesa que la de los adultos, la grasa subcutánea de los niños va aumentando de grosor en la pubertad, hasta que alcanza los niveles adultos. Por tanto, puede ser frecuente que se produzcan inyecciones intramusculares en personas muy delgadas y jóvenes si se utilizan agujas largas. De ese modo, las agujas más cortas que existen actualmente en el mercado (4 mm de longitud) atraviesan correctamente la piel tanto de niños como de adultos.
La absorción de la insulina es idéntica tanto si se administra con una aguja de 4 mm o de 8 mm.
Las agujas más cortas se toleran mejor, son más seguras y menos dolorosas: Recientes estudios han demostrado que la aguja de 4 mm es segura y eficaz en pacientes adultos de todos los IMC. Con esta longitud de aguja se recomienda la técnica de punción perpendicular (ángulo de 90 grados) sin pellizco.
Las agujas deberían medir como máximo 6 mm de longitud, ya que la aguja que se recomendaba anteriormente de 8 mm aumenta el riesgo de punción intramuscular.
Actualmente, la longitud más corta para pluma de inyección es de 4 mm y la de jeringuilla es de 6 mm (porque debe atravesar el tapón del vial de insulina).