Consumo de ciruelas pasas reduce marcadores de inflamación y pérdida ósea en mujeres posmenopáusicas

Consumir entre 50 y 100 gramos de ciruelas pasas diariamente mostró efectos notables en la reducción de citoquinas inflamatorias y monocitos activados.

Por: Jose Ibraim Alape


Un estudio reciente ha destacado un nuevo beneficio para la salud relacionado con el consumo diario de ciruelas pasas, especialmente beneficioso para las mujeres posmenopáusicas. Los resultados sugieren que el consumo diario de ciruelas pasas puede reducir los marcadores de inflamación asociados con las vías de señalización ósea, mitigando así los efectos de la pérdida ósea en este grupo demográfico.

La investigación, liderada por Mary Jane De Souza, profesora del Departamento de Kinesiología de la Universidad Estatal de Pensilvania, subraya la importancia de comprender cómo enfoques no farmacológicos, como las opciones dietéticas, pueden influir en la progresión y mitigación de la pérdida ósea, un problema significativo que afecta a más del 50 por ciento de las mujeres mayores de 50 años.

Beneficios del consumo de ciruelas pasas en mujeres posmenopáusicas

El estudio revela reducciones significativas en las citoquinas inflamatorias y los monocitos activados, componentes clave relacionados con la respuesta inflamatoria crónica y la pérdida ósea, respectivamente. Consumir entre 50 y 100 gramos de ciruelas pasas diariamente  mostró efectos notables. Estas reducciones incluyeron el factor de necrosis tumoral-a y las secreciones de interleucina-1, interleucina-6, interleucina-8, así como monocitos activados.

Connie Rogers, profesora y jefa del Departamento de Ciencias de la Nutrición de la Universidad de Georgia, señala que la riqueza de compuestos bioactivos presentes en las ciruelas pasas, como vitaminas, minerales, ácidos fenólicos y polifenoles, actúan sinérgicamente para suprimir los monocitos activados y la secreción de citocinas inflamatorias asociadas con la pérdida ósea.

Importancia en el contexto de la menopausia

La menopausia es una etapa que genera inquietudes en las mujeres, y la salud ósea es una de las preocupaciones destacadas. Francisco Pita, miembro del Comité Gestor del Área de Nutrición de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, destaca la importancia de ajustar la dieta durante la menopausia para garantizar adecuadas raciones de calcio, crucial para la salud ósea.

Mónica Herrero, miembro del Consejo General de Colegios Oficiales de Dietistas-Nutricionistas, aconseja llevar una alimentación saludable basada en productos frescos y la reducción de alimentos procesados, destacando la necesidad de asegurar las raciones de lácteos para cubrir las aumentadas necesidades de calcio en esta etapa.

Detalles del estudio 

El estudio se llevó a cabo como parte del ensayo Prune, un estudio de control aleatorio de 12 meses que exploró marcadores inmunológicos, inflamatorios y de estrés oxidativo relacionados con los efectos protectores de las ciruelas pasas en mujeres posmenopáusicas. Los resultados indican que el consumo de ciruelas pasas puede ser una herramienta dietética valiosa para contrarrestar la pérdida ósea en esta población.

Además, se destaca un estudio previo que mostró conexiones entre el consumo diario de ciruelas pasas y la integridad del hueso de la cadera en mujeres posmenopáusicas. Aquellas que incluyeron ciruelas pasas en su dieta mostraron una pérdida de densidad ósea de la cadera significativamente menor en comparación con aquellas que no consumieron ciruelas pasas.

Por aproximadamente 100 calorías, una porción de ciruelas pasas proporciona más de 20 vitaminas, minerales y compuestos vegetales diferentes, consolidándolas como un superalimento beneficioso para la salud. La investigación destaca la relevancia práctica significativa de estos hallazgos, considerando la prevalencia de la pérdida ósea en mujeres posmenopáusicas. 

Reducción del riesgo de enfermedades crónicas

Este estudio refuerza la importancia de considerar opciones dietéticas enfoques no farmacológicos para abordar problemas de salud específicos, especialmente en poblaciones vulnerables como las mujeres posmenopáusicas. Las ciruelas pasas se perfilan como una opción nutricionalmente rica y accesible para promover la salud ósea y potencialmente reducir el riesgo de enfermedades crónicas en este grupo demográfico.

Fuente consultadas aquí y aquí




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