La Hidradenitis Supurativa suele aparecer en adultos jóvenes. Si bien puede surgir a cualquier edad, la prevalencia disminuye después de los 50-55 años.
La hidradenitis supurativa es una enfermedad inflamatoria, crónica y muy dolorosa. Afecta el sistema inmunológico, puesto que existe una desregulación del mismo y se crea un exceso de producción de sustancias inflamatorias que son las encargadas que se formen las lesiones características de la enfermedad.
Las protuberancias de la hidradenitis supurativa se forman porque los folículos pilosos se tapan, lo que atrapa las bacterias, provocando inflamación y ruptura. En la mayoría de los casos, se desconoce la causa de los bloqueos. La genética, el medio ambiente y los factores hormonales pueden desempeñar un papel aunque en algunos casos. La hidradenitis supurativa es causada por cambios en ciertos genes.
¿En qué momento puede aparecer esta enfermedad?
Según la Doctora Alma Cruz, dermatóloga y catedrática en la Escuela de Medicina en el departamento de Dermatología de Puerto Rico, esta enfermedad tiende a aparecerse después de la pubertad. “Estudios recientes han demostrado que aunque la prevalencia es más común en mujeres, 1 de 3 tiene esta condición, si la hidradenitis comienza antes de la pubertad, la prevalencia es mayor en varones”, acota la doctora.
¿Cómo es el diagnóstico de los médicos?
Para la doctora Alma Cruz, es fundamental que el médico, además de realizar una evaluación clínica, pueda documentar tres cosas importantes: lesiones características, las áreas donde se produce y el historial de recurrencia. En sus palabras, es así:
Lesiones características: Son abscesos, nódulos inflamatorios, tractos drenosos que pueden liberar pus o sangre.
Áreas características: Estas lesiones suelen aparecer en los pliegues del cuerpo; debajo de brazos, senos, área entre las piernas, muslos, entre el área genital, área alrededor del ano y los glúteos.
Historial de recurrencia: Según la doctora, si no hay recurrencia en las lesiones, no hay hidradenitis supurativa. Es decir, para poder diagnosticar esta enfermedad, es necesario que mínimamente haya dos recurrencias, que aparezcan, se controlen y vuelva a aparecer.
Manejo de la enfermedad
El manejo de la condición tendrá que ver con la edad, el área afectada y la severidad.
Severidad: en estadios leves, los tratamientos son antiinflamatorios, medicamentos para el dolor, antibióticos orales.
Moderado a severo: adición a los medicamentos para el dolor, se puede incorporar el tratamiento biológico, que consiste en inhibir los procesos inflamatorios con sustancias especiales para ello.
Severos a graves: adicional a todos los otros métodos, debe añadirse un manejo quirúrgico.
“El manejo quirúrgico está indicado cuando la severidad de la condición o el progreso de la condición no se puede controlar con el manejo médico. Tan pronto se empieza a observar que hay desarrollo de cicatrices, ese es el primer momento en decir que vamos a parar los antibióticos, ya hay que añadir un biológico, y si este no es suficiente, o tenemos lecciones muy intensas o dolorosas, ya es el momento de añadir cirugía”, agrega la dermatóloga.
Además, el manejo quirúrgico en la hidradenitis es solo para tratar el área que está afectada, pero no es un manejo para la condición en general.
Falta de información y educación
La dermatóloga Alma Cruz lleva más de 10 años investigando solamente la hidradenitis supurativa. Por eso, la experiencia le ha demostrado que dentro de los enfoques que se deben de tener en cuenta para tratar esta enfermedad, es necesario educar, tanto a los pacientes como a los mismos médicos.
“Los colegas médicos tenemos que tener la hidradenitis supurativa dentro de nuestro diagnóstico diferencial para poder hacer un diagnóstico más temprano. Ya cuando el paciente viene adelantado con la enfermedad, es más fácil reconocer de qué se trata. Pero si logramos realizar un diagnóstico más temprano, se podrá tratar la enfermedad y habrá un cambio drástico en la calidad de vida del paciente”, concluye la dermatóloga Cruz.