El primer caso de Hongo penicillium, ocurrió en Puerto Rico tras notar cambios de color en el efluente de diálisis de una paciente de 10 años de edad con el síndrome nefrótico congénito.
Por: Jean Mitchelle Vélez
El primer caso clínico de enfermedad producida por el hongo Penicillium se detectó tras notar cambios de color en el efluente de diálisis de una paciente infantil, afectada con el síndrome nefrótico congénito. La paciente a la que le extrajeron sus riñones a la edad de 5 años, llegó a la sala de emergencias del Hospital Universitario Pediátrico del Centro Médico de Puerto Rico cuando su madre notó el cambio de coloración mientras a la niña le practicaban diálisis de manera peritoneal en su hogar.
La mamá notó que el líquido con el que se estaba dializando estaba más oscuro de lo normal. La trae a la clínica de diálisis, le toman un cultivo y la envían para su casa, luego de una dosis de antibióticos intraperitoneal. A los dos días la llaman del hospital porque los resultados arrojan hongo y la peritonitis es bien común en pacientes que se dializan peritonealmente, pero es más común que sean por bacterias. Las que son por hongos son más peligrosas y más raras, requiere remover el catéter y que el paciente pase a hemodiálisis", contó Isabel Sánchez Cano, residente de primer año del hospital.
Inicialmente, los médicos señalaron que se trataba de un caso de infección por Candida, ya que es común en la aparición de peritonitis. Sin embargo, los resultados de los análisis de laboratorio reportan que se trataba de una infección provocada por Penicillium, hongo que funciona como antibiótico y del que se compone la penicilina, fármaco descubierto por Alezander Fleming. Contraer este hongo es una situación inusual para la medicina, pues en la literatura médica apenas se reportan 5 casos. De ellos, solo uno ha ocurrido en paciente pediátrico, mencionó la doctora en entrevista con MSP.
Además, Sánchez Cano agregó que los síntomas de peritonitis ocasionan dolores de barriga, fiebre, escalofríos, entre otros, que la paciente tratada no manifestó. La galena destacó que los síntomas del hongo son sutiles -por ejemplo, en este caso solo se acudió al médico tras notar el cambio de la coloración del fluido- pero que no se puede bajar la guardia, ya que estas infecciones suelen "ser más peligrosas si no se tratan a tiempo porque van dañando la membrana de filtración del peritoneo".
Por suerte, la menor no desarrolló complicaciones porque se pudo hacer intervención inmediatamente, gracias a la acción oportuna de la madre, pues padres de pacientes con el síndrome nefrótico congénito reciben instrucciones para aprender a manejar los síntomas y efectos que provoca la enfermedad. En este caso mencionado, el tratamiento -aunque solo duró seis semanas- fue retante para los médicos, ya que no se tiene una guía de tratamiento para infecciones por Penicillium.
Tardó porque esta paciente se está preparando para trasplante, así que le dimos dos semanas de anfotericina por vena y cuatro semanas hydro conazole oral, que ambos son antifungales, por lo tanto, tenemos que asegurarnos que esto no tenga recurrencia y que haya desaparecido. Antes de darla de alta los cultivos dieron negativo, pero ella se fue de aquí con tres semanas, y culminó las otras en su casa", sostuvo.
Actualmente, la condición de la paciente es estable. Sánchez Cano indicó al momento de la entrevista que "ella está muy bien, la acabo de ver".
Lo curioso de este caso clínico es que la menor estuvo expuesta, dos días antes de notar el cambio de color, durante una visita a un zoológico de animales acariciables, por lo que concluyen que quizás adquirió el hongo de algún animal.
No está de más mencionar que este hongo está en todas partes, incluyendo la comida. "Es importante notar estos cambios sutiles y educar a los padres de estos tipos de pacientes, para que busquen ayuda rápido y eviten complicaciones asociadas", finalizó la doctora.