La enfermedad renal crónica (ERC) ocurre cuando los riñones dejan de funcionar correctamente. Este proceso es extenso y ocasiona que estos órganos pierdan gradualmente su debido funcionamiento.
Por: Redacción MSP
Si padeces esta condición, lo más probable es que al principio de ella no te des cuenta, sus síntomas tienden a ser sutiles en sus inicios. Además, algo que debes tener en cuenta es que si padeces esta condición tienes mayor riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.
Lo anteriormente mencionado lo afirmó el Dr. Gilberto Rivera, cardiólogo y presidente de la Sociedad Puertorriqueña de Cardiología en entrevista con la Revista Salud y Cardiología. Además, comentó que: "La enfermedad renal es una condición que promueve lo que son los factores de riesgo no tradicionales, los factores de riesgo no tradicionales son condiciones que no están dentro de estos factores usuales que están presentes en la población general".
Procesos inflamatorios
Al indagar al Dr. Rivera acerca de los procesos inflamatorios por los que pasa el paciente explica que: "El paciente renal como parte de su enfermedad renal tiene una situación en que tiene presencia de procesos inflamatorios que son mucho más agresivo, el paciente renal tiene también un problema en términos de control del metabolismo de fosforo y calcio que eso también promueve enfermedad cardiovascular más agresivo".
¿Qué afectaciones en la salud produce la enfermedad renal en los pacientes cardiovasculares?
El Dr. Rivera indica que "El paciente renal pierde la capacidad de control de las presiones y suelen ser pacientes que tienden a tener presiones arteriales mucho más descontroladas, el paciente tiene aumento en presencia de procesos infecciosos, relacionados a los problemas de manejo renales, particularmente los pacientes que están en diálisis, que se tiene que someterse a procesos de catéter, etc. (...) También promueven otros tipos de situaciones y que en presencia de otros tipos de enfermedad cardiovascular pues van a aumentar más su mortalidad".
En ese sentido, para disminuir significativamente los efectos de estas enfermedades, te recomendamos consumir alimentos bajos en sodio, comer una cantidad normal de proteínas y aumentar la ingesta de alimentos saludables como frutas y verduras. Asimismo, puedes dejar a un lado las bebidas gaseosas y jugos artificiales y tomar más agua, líquido que beneficia significativamente la salud en general.