Esto ocurre con más frecuencia en la espondiloartritis axial.
Por: Yolimarian Torres
Un grupo de reumatólogos encontraron que más de la mitad de los pacientes con uveítis anterior aguda no infecciosa atendidos en clínicas de oftalmología en un nuevo estudio transversal tenían espondiloartritis (SpA), resaltando como principal objetivo, recomendar que todos los pacientes con esta patología informen sobre síntomas musculoesqueléticos a los reumatólogos.
Los resultados también sugieren que "los reumatólogos deben considerar que espondiloartritis en pacientes con uveítis, ya que esta podría presentarse de forma 'atípica' con dolor de espalda leve o sin dolor de espalda que comienza después de los 45 años y dura menos de 3 meses", así lo aseguró la Dra. Judith Rademacher, autora principal quien junto a sus colegas de Charité–Universitätsmedizin Berlin, publicaron su trabajo en línea en Arthritis & Rheumatology.
Entre todos los pacientes, una adaptación de la herramienta de referencia Assessment of SpondyloArthritis International Society (ASAS) demostró una menor especificidad para el reconocimiento de SpA que la herramienta de evaluación de la uveítis de Dublin (28 % frente a 42 %). La referencia de ASAS tuvo una sensibilidad ligeramente mayor que la herramienta de evaluación de uveítis de Dublin (80 % frente a 78 %).
"Teniendo en cuenta solo a los pacientes de uveítis sin diagnóstico previo de espondiloartritis, un reumatólogo tendría que ver a 2,1 pacientes que cumplieran la herramienta ASAS o a 1,9 pacientes que cumplieran el DUET para diagnosticar a un paciente con EsA. Sin embargo, con ambas estrategias de derivación más del 20 % de las EsA los pacientes se habrían perdido", escribieron los investigadores.
"Esto podría deberse a una 'presentación inusual' de SpA en esos pacientes, ya que su dolor de espalda comenzó con más frecuencia después de los 45 años, duró menos de 3 meses y, por lo tanto, los criterios de clasificación de ASAS se cumplieron con menos frecuencia", indicaron.
Espondiloartritis
La Asociación del Colegio Americano de Reumatología, indica que la espondiloartritis es un tipo de artritis que ataca la columna y, en algunas personas, las articulaciones de brazos y piernas. También puede involucrar la piel, los intestinos y los ojos. El principal síntoma en la mayoría de los pacientes es el dolor lumbar.
La espondilitis anquilosante es hereditaria y muchos genes pueden provocarla. Se han encontrado hasta 30 de estos genes. El principal que causa esta enfermedad es el HLA-B27. Casi todas las personas de raza blanca con espondilitis anquilosante son portadoras de este gen.
Los tratamientos más nuevos han ayudado mucho en el control de los síntomas, y son útiles la actividad física frecuente y los ejercicios para la espalda.
Uveítis
Por su parte, la Clínica Mayo, indica que la uveítis es una forma de inflamación ocular. Afecta la capa media del tejido de la pared ocular (úvea).
Las señales de advertencia de la uveítis suelen aparecer de repente y empeorar con rapidez. Estos incluyen el enrojecimiento del ojo, dolor y visión borrosa. La afección puede ocurrir en uno o ambos ojos, y puede afectar a personas de todas las edades, incluso a niños.
Fuente consultada aquí.